Sintel presenta un expediente de despido para el resto de la plantilla, 960 trabajadores
El nuevo administrador único de Sintel, Vicente Carretero, presentó ayer, en la Dirección General de Trabajo, el tercer expediente de regulación de empleo, que afecta a 960 trabajadores más, lo que supone el resto de la plantilla tras los dos expedientes anteriores. El primero que presentaron los anteriores gestores, herederos del desaparecido Jorge Mas Canosa, afectó a 796 empleados, es decir, el 44% de la plantilla. El pasado mes de marzo, el Ministerio de Trabajo aprobó este despido, pese a la oposición del informe de la inspección, que calificó esta medida de " inútil porque no garantizaba la viabilidad futura de la compañía".
El segundo expediente, que afectó a 405 empleados más, lo presentó Carlos Gila, quien compró la compañía por dos euros a principios de este año. Con todo esto, " se ven las intenciones de liquidar la compañía que la dirección tenía desde el principio", dicen los trabajadores, acampados en el madrileño Paseo de la Castellana desde hace más de tres meses.
Sin embargo, "esta situación no cambia el objetivo de lucha para conseguir una mesa de negociación, que solicitó el Congreso hace varias semanas, a fin de buscar una solución", apuntó Valeriano Aragonés, presidente del comité de Sintel en Madrid.
Por su parte, el Juzgado de Primera Instancia número 42 de Madrid dictó un auto fechado el 4 de mayo en el que admite la "insolvencia definitiva" solicitada por la dirección de Sintel "por exceder el pasivo al activo en 9.877 millones de pesetas y una vez transcurrido el tiempo legal sin que la sociedad o persona en su nombre haya depositado esta diferencia".
CC OO y UGT han convocado una manifestación para hoy a las seis y media de la tarde en Madrid para reivindicar el pago de las nóminas atrasadas y "pedir al Gobierno que intervenga en la solución de la crisis mediante la convocatoria de diálogo, "como se ha comprometido, entre el Ejecutivo, los sindicatos y Telefónica, antigua propietaria de la compañía y que decidió vender Sintel a la familia Mas Canosa en 1996".