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POLÍTICA

El PSOE lleva a la Junta Electoral la ocultación del sondeo del CIS

La decisión del Gobierno de no dar a conocer en tiempo legal el sondeo elaborado por el Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) sobre intención de voto en el País Vasco ha levantado una densa polvareda política en la recta final de la campaña electoral. El PSOE llevó ayer a la Junta Electoral Central la ocultación del sondeo, algo que en opinión de la secretaria general de su grupo parlamentario, María Teresa Fernández de la Vega, carece de antecedentes desde el inicio de la democracia y supone "un acto de deslealtad política". En fuentes gubernamentales se reconoce que lo sucedido ha sido una torpeza política.

El Gobierno no ha facilitado hasta el momento a los grupos políticos razones convincentes para la ocultación de dicho sondeo, más allá de las supuestas dificultades que habrían tenido los trabajadores del CIS para elaborar el trabajo de campo. Sin embargo, 60 trabajadores del centro difundieron ayer un comunicado en el que niegan precisamente estas dificultades y aseguran que en su trabajo cumplieron los plazos previstos.

En el comunicado difundido por estos trabajadores se niega la existencia de los problemas técnicos a los que aludió el Ejecutivo para difundir dicha encuesta y se aclara que ésta quedó finalizada en plazo reglamentario para ser difundida, antes de los cinco días previos a las elecciones. Desde estas circunstancias, los trabajadores exigen en una carta al presidente del CIS, Ricardo Montoro, que les defienda de las críticas surgidas para que se respete su profesionalidad.

La mayoría de las fuerzas políticas se pusieron ayer del lado de los trabajadores del centro y criticaron la actitud del Gobierno. El PSOE e IU solicitaron a la Junta Electoral que investigue las causas por las que el Gobierno ha ocultado el sondeo. Ambas formaciones, junto al PNV y EA, han pedido la comparecencia urgente en el Congreso del ministro de la Presidencia, Juan José Lucas, para que explique las razones de fondo del conflicto creado por el Gobierno. Los socialistas opinan, además, que la presidenta del Congreso, Luisa Fernanda Rudi, debería haber intervenido para que los parlamentarios pudieran acceder al sondeo en los plazos previstos.

A estas alturas de la campaña la polémica se complica para el Ejecutivo, pues la vicelehendakari, Idoia Zenarruzabeitia, advirtió ayer que el Gobierno vasco recurrirá ante los órganos judiciales competentes si finalmente la encuesta del CIS se distribuye a los grupos políticos, en el caso de que el procedimiento elegido atente contra la Ley Electoral vasca.

Manipulación de TVE

La citada norma fija el plazo de cinco días antes de las elecciones como fecha límite para la difusión de encuestas y su recepción por los partidos políticos. "Veremos cuál es el procedimiento que se utiliza porque podría vulnerar, estando fuera de plazo, lo contenido en nuestra ley de elecciones", subrayó Zenarruzabeitia.

Por otra parte, la coalición PNV-EA denunció ayer ante la Junta Electoral Central el "ocultamiento intencionado" por parte de Televisión Española de la declaración institucional de condena del asesinato del presidente del PP aragonés, Manuel Giménez Abad, realizada el pasado domingo por el lehendakari, Juan José Ibarretxe.

Los nacionalistas pidieron a TVE que presente rápidamente las alegaciones para que no se agote el plazo y la Junta pueda resolver antes de que finalice la campaña electoral.

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