Moody's pone en duda el logro de la meta fiscal en Argentina
El mal dato de la recaudación en abril ha vuelto a suscitar dudas sobre la solvencia de la economía argentina. Tantas que la agencia de calificación Moody's ratificó ayer la posibilidad de revisar a la baja la valoración de la deuda porque ve difícil el cumplimiento de los objetivos fiscales para 2001.
Moody's sostiene que los ingresos fiscales menores de lo previsto (cayeron el 9,1% en abril, frente al 6% estimado inicialmente por el Gobierno) indican una persistente debilidad en la economía y sugieren que continúan las dificultades en cumplir con las metas fiscales durante el resto del año.
El informe de Moody's aparece poco después de que el Gobierno de Fernando de la Rúa y el Fondo Monetario Internacional (FMI) alcanzaran un nuevo acuerdo para cumplir el objetivo de déficit de este año (de 6.500 millones de dólares, unos 1,2 billones de pesetas), que en el primer trimestre tuvo ya una desviación sobre lo previsto de 1.000 millones de dólares (186.800 millones de pesetas).
El Gobierno había anunciado que ayer se desvelarían los detalles del acuerdo, pero finalmente se retrasó a hoy este anuncio.
El Ejecutivo sostiene que la fuerte caída de la recaudación "se debe a una situación compleja que arrastra Argentina y que provoca incertidumbre en los mercados" y que refleja un bajo nivel de actividad y un alto nivel de evasión, según el asesor del Ministerio de Economía Adolfo Sturzenegger.
La recaudación ya cayó en abril un 12,1%, pero se esperaba que las modificaciones introducidas por el ministro de Economía, Domingo Cavallo, en el sistema fiscal permitieran una mejora de la recaudación inmediata.
Las explicaciones no sirvieron para calmar a los mercados. El riesgo país volvió a rondar ayer los 1.100 puntos básicos y los bonos cayeron en los mercados internacionales.
Otro de los aspectos que mantiene a los mercados en vilo es la decisión de Cavallo de incluir el euro en el sistema de cambio del peso, ahora ligado al dólar, cuando am-bas divisas alcancen la paridad. Los analistas consideran que en un momento de incertidumbre como el actual, la inclusión del euro en el tipo de cambio supondrá una devaluación de hecho del peso, que terminará por agravar la situación de la economía.
Sin embargo, Cavallo consiguió ayer el apoyo del Congreso a su proyecto de ley, que a su juicio "es una pieza clave del programa económico para darle más estabilidad a la economía argentina", señaló tras la aprobación del Congreso.
Acuerdos sin el Mercosur
La medida tiene que pasar ahora por el Senado, donde la oposición peronista tiene mayoría y cuyos diputados en el Congreso votaron en contra de la ley.
Cavallo quiere, además, abrir los productos argentinos a nuevos mercados para promover la actividad. Para ello, el titular de Economía no descartó ayer cerrar acuerdos bilaterales con Estados Unidos al margen del Mercosur, lo que sin duda suscitará las iras del vecino Brasil.
Cavallo sostiene que el Mercosur "está lejos todavía de ser una zona de libre comercio perfeccionada", por lo que sus miembros "no deberían descartar la negociación bilateral" con EE UU.