Valencia lanza un nuevo plan de reducción de licencias de taxis pese al fracaso del de 1997

La Consejería de Obras Públicas, Urbanismo y Transporte ha vuelto a lanzar ayudas para la retirada voluntaria de licencias de taxis. A pesar del escaso éxito de convocatorias anteriores, el sector espera una mayor respuesta este año que permita reducir el número de taxis que operan en Valencia.

Los taxistas de Valencia no han secundado de forma suficiente las medidas aprobadas por el propio sector para reducir el número de licencias en el área metropolitana y poder hacer rentable esta actividad.

La Consejería de Obras Públicas, Urbanismo y Transporte (Coput) publicó ayer de nuevo el programa anual de ayudas a la retirada de licencias, "ya que continúa existiendo la misma problemática" que en 1997, cuando se lanzaron estas subvenciones por primera vez.

La orden recoge que la Coput pagará 4.750.000 pesetas (28.548 euros) a los propietarios de una licencia de taxi mayores de 55 años que decidan abandonar la actividad. La consejería, por su parte, amortizará este permiso, con lo que se reducirá el número de taxis que prestan servicio en el área metropolitana. La Generalitat tiene destinados 50 millones de pesetas (300.506 euros) a este capítulo.

El objetivo de la orden es rebajar al menos 400 el número de taxis que circulan por la ciudad y que, según cifras de la Consejería de Obras Públicas, Urbanismo y Trans-porte, era de 2.874 en noviembre de 2000.

Estas medidas ya se pusieron en marcha en los años 1997 y 1998. Sin embargo, el resultado dista mucho del deseado. Aunque la consejería no pudo facilitar ayer datos concretos, reconoció que el número de titulares de una licencia que se habían acogido a esta medida en los años precedentes era prácticamente insignificante.

A pesar del escaso eco de estas ayudas entre el sector en las anteriores convocatorias, el presidente de la Asociación Gremial del Taxi de Valencia, Jesús López, asegura que en esta ocasión las expectativas son mejores. "A lo largo de las últimas semanas y del día de hoy [por ayer, día de publicación en el Diario Oficial de la Generalitat Valenciana de la orden], son ya muchos los taxistas que se han interesado", apunta López, que cifra en unos 20 los propietarios de licencias que han mostrado ya su interés firme por acogerse al plan.

"Es cierto que hasta ahora la medida no había contado con el respaldo del sector, fundamentalmente porque había una cierta reticencia de los taxistas", dice López, que añade: "En algunos casos han aparecido intermediarios que aconsejaban a los taxistas que querían retirarse que vendiesen a terceros la licencia, ya que la Administración tardaba mucho en pagar y ellos ofrecían el dinero en mano". La cantidad que ofrecían era en estos casos inferior a la propuesta por la consejería.

"Pero tras las primeras experiencias", añade López, "parece que la gente sí confía en el pronto pago de la Generalitat" [la Administración tarda unos tres meses en abonar la subvención por la retirada a los taxistas].

Lo paradójico de la situación es que en convocatorias anteriores, como la de 1998, la retirada de la licencia estaba mucho mejor pagada.

Cambio de criterios

Así, la Coput ofrecía a los taxistas mayores de 55 años y con más de 10 años de actividad 3.750.000 pesetas (22.537 euros) por dejar el volante, a lo que añadía 250.000 pesetas (1.502 euros) por cada seis meses que le faltaran para llegar a los 65 años, ayuda que no consta en la orden de este año. La cifra total podía llegar a 8,7 millones de pesetas (52.288 millones de euros). La única ventaja es que en la actualidad se han rebajado los años mínimos de actividad hasta tres.

A pesar de que el estudio que se realizó en el año 1997 apuntaba la necesidad de reducir el número de taxis del área metropolitana de Valencia en unos 400, Jesús López matiza que en la actualidad esta cifra podría haber descendido.

"Nosotros, que somos una especie de barómetro de la situación económica, hemos comprobado que las cosas han mejorado en los últimos años, con lo que quizá sea suficiente con reducir entre 100 y 150 licencias para que el trabajo sea rentable", explica el presidente del gremio de taxistas.

A esta mejora de la situación ha contribuido una medida que ya funcionaba en otras ciudades españolas, y es fijar un día de descanso. Con esta iniciativa se consigue que unos 600 coches se queden en el garaje diariamente, y según fuentes de la consejería, aunque los ingresos por vehículos son los mismos al final del año, se reducen los costes de combustible y mantenimiento.

Paralelamente, y de cara a regular el transporte metropolitano de Valencia, la Generalitat va a crear un organismo encargado de gestionar las políticas de transporte de pasajeros en la zona, donde se incluirá el sector del taxi. Será este organismo el que asuma toda la reestructuración del sector que hasta la fecha está llevando a cabo la Consejería de Obras Públicas.