Repunta la producción industrial de EE UU y el IPC sigue controlado
Estados Unidos publicó ayer dos indicadores económicos bastante esperanzadores: la producción industrial repuntó un inesperado 0,4% en marzo y el IPC mensual subió un tímido 0,1%. Datos que, según los analistas, harán que la Reserva Federal espere hasta mayo para volver a bajar los tipos.
La Reserva Federal de Estados Unidos tiene dos motivos menos para bajar de inmediato los tipos de interés. Por un lado, la producción industrial registró un repunte del 0,4% en el mes de marzo (cuando la mayoría de los analistas auguraba un declive). Por otro, el índice de precios al consumo (IPC) del mes pasado subió sólo un 0,1% mensual. La tasa subyacente (que no incluye ni alimentos ni energía) aumentó un tímido 0,2%, y la inflación interanual bajó del 3,5% al 2,9%.
Una combinación de datos que, según los analistas de Wall Street, invitarán a los gobernadores del banco central a esperar hasta la reunión del 15 de mayo para volver a bajar los tipos de interés. La Reserva Federal ha abaratado el precio oficial del dinero en tres ocasiones en lo que va de año, recortando los tipos interbancarios un 1,5 puntos, hasta el 5%.
El aumento de la producción industrial (que en febrero había caído un 0,4%) sirvió para alejar momentáneamente el temor a una recesión que ha invadido el país en los últimos meses.
Sin embargo, analistas e inversores creen que es demasiado pronto para cantar victoria en este terreno. Se trata del primer aumento de la producción industrial desde el mes de septiembre, y el principal motor de la subida fue el sector del automóvil. De hecho, si se excluye este sector, el dato de producción industrial se mantuvo sin cambios el mes pasado.
Las fábricas son las que se han visto más afectadas por la desaceleración de la demanda y el sector industrial llevaba meses técnicamente en recesión. Sólo en marzo, las fábricas estadounidenses suprimieron 81.000 empleos y el último informe de la Asociación Nacional de Gestores de Compras indica que el sector todavía está contrayéndose.
El informe de producción industrial publicado ayer por la Reserva Federal también advierte que, a pesar del buen dato de marzo, la producción industrial del país ha caído un 4,7% en los tres primeros meses del año, el mayor descenso registrado desde el primer trimestre de 1991 (cuando Estados Unidos atravesaba su última recesión).
En cuanto al dato de IPC, se vio moderado sobre todo por el declive de los precios de los productos energéticos: la gasolina bajó un 3,8%, y el gas natural, un 2,1%. Además bajaron los precios de los billetes aéreos (estrechamente ligados a los del combustible), del tabaco y de los vehículos nuevos.
Es decir, que la inflación sigue siendo el menor de los problemas que tienen que afrontar el gobernador Alan Greenspan y su equipo.