La confirmación de un caso en León eleva a 39 el número total en España
La Cátedra de Anatomía Patológica de la Facultad de Veterinaria de León confirmó ayer el positivo de encefalopatía espongiforme bovina (EEB) de la vaca de una explotación leonesa de la localidad de Columbrianos, lo que supone el quinto caso de mal de las vacas locas en esta provincia y el número 39 en toda España.
Según informó la Delegación Territorial de la Junta en León, el pasado 29 de marzo los servicios de veterinaria inmovilizaron los 59 animales de esa explotación para su sacrificio, mientras que la res entonces sospechosa de padecer la enfermedad fue sacrificada ese mismo día en el matadero de Astorga.
Por otro lado, los servicios veterinarios proceden a la recogida de pruebas para elaborar la encuesta epidemiológica y conocer si la vaca que ha dado positivo de la EEB fue alimentada con harinas cárnicas.
La vaca es de raza frisona, nació en 1996 y pertenece a una granja de la localidad leonesa de Columbrianos. Con este son cinco los casos del mal de las vacas locas aparecidos en la provincia de León y ocho en Castilla y León.
Por su parte, el Gobierno tiene previsto aprobar en el Consejo de Ministros de hoy viernes un plan de ayudas de más de 14.000 millones de pesetas para paliar la crisis.
También tiene previsto aprobar créditos blandos por valor de 50.000 millones de pesetas en 2001 para paliar la crisis del sector ganadero derivada del mal de las vacas locas, según adelantó ayer en el Congreso el ministro de Agricultura, Miguel Arias Cañete.
Este plan es fruto de las reuniones que mantuvo esta misma semana el subsecretario del ministerio, Manuel Lamela, con las distintas organizaciones representativas del sector. Los ganaderos cifran en 60.000 millones de pesetas las pérdidas sufridas a consecuencia de la crisis de las vacas locas.
Asimismo, el Consejo de Ministros aprobará previsiblemente en su reunión de hoy un proyecto de decreto-ley que modificará el actual régimen de infracciones y sanciones en materia de actividad ganadera y control de piensos, informaron en fuentes oficiales.
La normativa contemplará penas de cárcel y multas de hasta 200 millones de pesetas por utilización indebida de piensos y contrabando de reses, frente a las penas que se imponen en la actualidad, situadas entre 25.000 pesetas y 2,5 millones de pesetas. El objetivo de esta medida es frenar el uso indebido de los piensos por parte de algunos ganaderos ante el mal de las vacas locas.