Santana Motor cifra sus pérdidas operativas del año pasado en 1.081 millones
El consejo de administración de Santana Motor cifró ayer sus pérdidas operativas del pasado año en 1.081 millones de pesetas (6,5 millones de euros) "excluidas las vinculadas al cambio del yen", según informó la empresa.
Las pérdidas totales, una vez contabilizadas las relativas al yen, alcanzan los 7.000 millones de pesetas. Asimismo, aseguraron que la empresa han incluido como pérdidas operativas las imputables directamente a la gestión de ésta y no los cerca de 6.000 millones que se deben a otros gastos como los del cambio del yen.
La empresa señala que las compras realizadas a Japón durante el pasado ejercicio ascendieron a 25.041 millones de pesetas (150,5 millones de euros), produciéndose un desfase entre las expectativas y la compra final, ya que Santana esperaba adquirir a un tipo de cambio de 138,65 yenes por euro, cuando el cambio medio ha sido finalmente de 102,08 yenes por euro.
La facturación de la empresa en el año 2000 ha descendido a 62.960 millones de pesetas (378,4 millones de euros), lo que supone una reducción del 3,5% respecto al año anterior. Mientras, la fabricación se ha elevado a 33.821 vehículos, un 3,1% menos que en 1999.
Santana explica que "las circunstancias negativas que afectaban a las sociedades del grupo, especialmente la apreciación del yen y el retraso en la financiación del plan estratégico motivado por las dificultades surgidas frente a la UE han ocasionado el cierre negativo del ejercicio".
El consejo de administración analizó también el plan de acción de la empresa que contenía medidas y actuaciones "para hacer frente a la difícil situación por la que atraviesa la factoría", y añadió que "se han racionalizado las actividades productivas del grupo y reducido los costes fijos, mientras que se ha iniciado la privatización de actividades productivas para saturar las instalaciones y conseguir nuevos clientes".
Así, indica que el grupo Santana ha segregado las actividades de fabricación de componentes con la finalidad de privatizarlas a corto plazo, se ha asignado a la sociedad matriz "el núcleo de fabricación de vehículos y se ha avanzado en el rejuvenicimiento de la plantilla y la mejora de la productividad".
La empresa añade en el comunicado que con estas operaciones "se prevé superar las deficiencias estructurales y coyunturales de Santana, logrando el mantenimiento de su proyecto industrial" de modo que se ha conseguido reducir los costes de personal, estructuras y financieros.