Enagas e Iberdrola ultiman el pacto de suministro a la central de Castellón

Enagas, del grupo Gas Natural, e Iberdrola perfilan un acuerdo que posibilitará el suministro de gas a la central que la eléctrica vasca va a construir en Castellón. En el contrato que se negocia, Iberdrola se asegurará para ese proyecto la disponibilidad de capacidad de transporte en la red de gasoductos y en una planta de regasificación, previsiblemente la de Cartagena. La compañía que preside Íñigo de Oriol suscribió el pasado año un acuerdo de abastecimiento de gas con el ENI.

Las relaciones de Iberdrola y Enagas, del grupo Gas Natural, comienzan a reconducirse tras la advertencia del grupo gasista de que únicamente se puede comprometer a asegurar el suministro a cada proyecto de generación de ciclo combinado si las empresas propietarias suscriben un contrato en firme con aproximadamente dos años de antelación.

En este contexto, el acuerdo para el abastecimiento de la central que la eléctrica vasca diseña en Castellón está avanzado, señalan medios consultados. "El debate se está racionalizando", se añade. No obstante, dado que todavía el pacto no se ha suscrito, se pueden producir ciertos retrasos en la entrada en funcionamiento de la central respecto al calendario inicial.

Disponer de un contrato de gas con una compañía productora no es el único aspecto que hay que resolver para asegurarse el avituallamiento. Es preciso, además, la construcción de las infraestructuras que transporten el gas hasta la futura central y que Enagas, como gestor técnico del sistema, reserve asimismo capacidad en las grandes redes de gasoductos y en las plantas de regasificación por un periodo de unos 20 años. Para planificar esas inversiones y la disponibilidad de la capacidad de las redes actuales o futuras, Enagas pide con antelación los mencionados contratos.

Convenios firmados

Endesa es la única eléctrica que ya ha firmado convenios de esas características con Enagas, y no soló para la central de Cádiz (que entrará en funcionamiento a finales de este año) y para la de Barcelona, sino también para su proyecto de Tarragona. Con los acuerdos en firme, la compañía propietaria se compromete a pagar los peajes en la fecha pactada para su entrada en vigor, con independencia de que su proyecto eléctrico esté o no concluido.

Iberdrola, por su parte, mantuvo una posición diferente y optó por denunciar a Enagas ante la Comisión Nacional de la Energía (CNE) cuando la empresa gasista le comunicó que no podía asegurar el suministro a Castellón y a Castejón (Navarra). La eléctrica lo que sí suscribió fue un acuerdo con el Ente Nazionale d'Idrocarburi (ENI) para el suministro de 1,5 bcm (miles de millones de metros cúbicos) de gas al año, que prevé destinar prioritariamente a las centrales anteriormente citadas de 800 a 400 megavatios.

Pese a la mejora de las relaciones, los responsables de Gas Natural, propietaria al 100% de Enagas, consideran que es necesario que tanto las empresas energéticas como la CNE y la Administración acuerden las prioridades de los proyectos eléctricos para racionalizar todo el proceso inversor.

 

Un consejo que despierta expectativas

Iberdrola celebra esta semana una reunión de su consejo de administración, en la que se prevé aprobar definitivamente las cuentas de resultados del ejercicio del 2000, así como la fecha para la celebración de la junta de accionistas (programada en segunda convocatoria para el 19 de mayo). Sin embargo, las expectación que en medios del sector esta reunión ha creado no está motivada por esos temas.

El interés se centra en la elección pendiente del sucesor al actual consejero-delegado, Javier Herrero, a quien ya se le ha comunicado que no permanecerá en su actual puesto. No obstante, según fuentes consultadas, la aprobación del sustituto podría no resolverse en este próximo consejo. Y es que, aunque Oriol y los accionistas institucionales de Iberdrola (BBVA y BBK) sopesan las ventajas de dos candidatos (ambos son figuras de peso en sus sectores), el acuerdo no está cerrado.

No obstante, las consecuencias de la fallida fusión con Endesa y de la modificación de sus alianzas internacionales se manifiestan en diversos temas. Electricidade de Portugal (EDP) que adquirió junto a Iberdrola la distribuidora de Guatemala (Eegsa) ha manifestado que quiere también romper esa participación cruzada y prevé que sea adquirida por su antiguo socio.