El transporte de residuos nucleares en Alemania se inicia con revueltas
El primer transporte de residuos nucleares desde Francia a Alemania en cuatro años generó ayer las primeras escaramuzas entre miles de manifestantes y policías congregados en los alrededores del vertedero de Gorleben, en el norte del país. El convoy con seis contenedores partió en la madrugada de ayer de la planta de tratamiento de La Hague y debía llegar a la frontera francoalemana anoche. Por las experiencias de años pasados, se esperan duros enfrentamientos, sobre todo en el tramo final del trayecto.
Greenpeace y otras organizaciones critican que este tipo de transportes es inútil mientras que no se cuente con un depósito final para los residuos nucleares. Alemania envía una parte de los residuos a La Hague, donde son sometidos a un tratamiento que recupera elementos reutilizables.
La autorización del transporte corrió por cuenta del ministro ecologista Jürgen Trittin, quien el año pasado negoció el fin de la energía nuclear en Alemania.