Renfe tiene que reformar 21 locomotoras para inaugurar la línea de AVE
Renfe ha decidido cambiar a ancho internacional los ejes de 21 locomotoras de gran potencia de su parque de trenes para poder estrenar el primer gran tramo de la línea de alta velocidad Madrid-Barcelona, que discurre entre Madrid y Lleida, a finales de 2002 o en los primeros meses de 2003, en función de cuando se inaugure, con coches (vagones) el Talgo 200.
Renfe no disponía en este momento de máquinas aptas para circular a alta velocidad, más de 200 kilómetros por hora, de ancho internacional, por lo que opta por transformar parte de las 60 locomotoras de ancho ibérico del tipo 252 que tiene en su parque, y que hasta ahora eran utilizadas de forma habitual para el transporte de mercancías.
El operador ferroviario se prepara para aprovechar ese tramo de vía desde el primer día en que esté disponible, lo que facilitará un recorte sustancial de los tiempos de viajes en los trayectos que discurran parcialmente o totalmente por ese trayecto. Es el caso del Madrid-Barcelona, que desde ese momento se realizará por la línea AVE entre Madrid y Lleida y por la línea antigua de ancho Renfe hasta Barcelona, de un modo similar a la explotación actual de la línea Madrid-Málaga.
Las locomotoras de gran potencia 252, desarrolladas por el grupo Siemens, se utilizarán en esos trayectos mixtos hasta que Renfe disponga de trenes completos con sistema automático de cambio de ancho en todo el convoy.
La compañía ferroviaria que preside Miguel Corsini tiene en marcha un concurso de adjudicación de ocho trenes con esta tecnología, con la posibilidad de cerrar opciones sobre varias unidades más.
Este pedido, por el que pujan Talgo, en consorcio con ADtranz, y CAF, en alianza con Alstom, se resolverá en las próximas semanas, por lo que el suministro de los nuevos trenes no podrá realizarse antes de 2003.
Una vez Renfe disponga de este material rodante lo utilizará también en el Madrid-Lleida para reducir aún más los tiempos de viaje gracias al ahorro de tiempo que se obtendrá con el nuevo material al realizar el cambio de ejes de forma automática, sin necesidad de cambiar la locomotora.
Renfe sí dispone de material Talgo de nueva generación para ser remolcado por esas locomotoras en la nueva línea 200 kilómetros por hora. De hecho, esos vagones ya circulan en la relación Madrid-Barcelona desde hace varios meses y serán los que remolquen las locomotoras transformadas.
Este proceso de transformación de las 21 locomotoras supondrá una inversión de 1.800 millones, que se realizará por Renfe en sus propios talleres y por Siemens. Para suplir las máquinas que se cambian de ancho, explotadas hasta ahora por la unidad de transporte combinado, Renfe procederá a modernizar 98 locomotoras del tipo 269, más antiguas, operación en la que invertirá 2.100 millones. En ese caso, las mejoras se centrarán en la renovación de motores, optimización de los sistemas de transmisión y fiabilidad en general de las locomotoras.