Egaña invertirá 60.000 millones en crecer en el exterior y en comprar empresas
Corporación Industrial Egaña (CIE) quiere convertirse en dos años en uno de los cinco mayores fabricantes nacionales de componentes de automoción. Para entrar en este selecto grupo invertirá 60.000 millones de pesetas (360,61 millones de euros) en tres años. Este presupuesto se destinará en un 50% a reforzar su base industrial actual (integrada por 10 fábricas) y el otro 50% (180,3 millones de euros) a ganar dimensión a través de la compra de empresas y de implantaciones propias, en cualquier parte del mundo. CIE facturó 30.000 millones de pesetas el año pasado con 2.500 trabajadores, y para 2003 se ha fijado el objetivo de más que triplicar su volumen de ventas, hasta 100.000 millones de pesetas (601,01 millones de euros), y duplicar su plantilla y emplear a 5.500 personas. La nómina de fábricas también aumentará, en este caso hasta 18 centros.
CIE tiene ahora siete factorías en España y tres más repartidas por Brasil, México y República Checa. En el país carioca ha iniciado la construcción de su segundo centro con una inversión de 2.000 millones de pesetas (12,02 millones de euros), y quiere tener un total de cuatro, puesto que Brasil lidera la producción de vehículos en Latinoamérica. Egaña dará el próximo año el salto a Asia, para implantarse industrialmente en India o China. Antes comprará dos compañías españolas del sector. Además ultima la adquisición de un centro que la multinacional Robert Bosch tiene en la localidad madrileña de Aranjuez, y en el que tiene previsto invertir 3.000 millones de pesetas (18,03 millones de euros).
Este crecimiento será financiado con recursos propios, con ampliaciones de capital suscritas por los accionistas y con financiación externa, cada una de estas partidas en una proporción del 30%. Corporación Industrial Egaña destina todos los beneficios a inversiones (su cash flow es del 16% sobre las ventas consolidadas) y su capital está participado en más del 50% por el Instituto Sectorial de Promoción y Gestión de Empresas (Inssec), el club de inversores que agrupa al BSCH, Abelló, Ballvé y la familia Matutes, entre otros. El grupo de automoción Gestamp y BBK son accionistas minoritarios.
La corporación quiere ganar dimensión para situarse entre los líderes de la industria de automoción, que según sus cálculos quedará limitada a nivel mundial a ocho marcas, a 25 grandes suministradores y a otros 200 proveedores de segundo nivel que sólo trabajarán para los de primer nivel.