EMusic y la productora de los Grammy también demandan a Napster
Napster ha sido objeto de otras dos demandas que la acusan de facilitar el pirateo a través de Internet. La empresa EMusic (una cibertienda musical que sí paga derechos de autor) y la Academia Nacional de las Artes y las Ciencias Discográficas (productora de los Premios Grammy) presentaron sendas querellas contra la compañía en la noche del martes.
Las nuevas demandas llegan en el peor momento para Napster, que el martes vio cómo la juez Marilyn Hall Patel emitía por fin el mandato que le prohíbe seguir facilitando los canjes gratuitos de música protegida por derechos de autor.
El mandato es lo suficientemente vago como para que algunos hablen de decisión salomónica: Napster debe ejercer como policía de su servicio y las discográficas tienen que colaborar en la identificación de los títulos que deben filtrarse. Pero, en último caso, la responsabilidad de frenar este tipo de intercambio de música gratuita recae sobre Napster.
Así las cosas, muchos expertos creen que la compañía tendrá que intensificar sus esfuerzos para sellar un pacto amistoso con las discográficas si quiere sobrevivir (la consultora Gartner Inc. afirma que, si no lo hace, tendrá dificultades para sobrevivir de aquí al verano).
Ambas partes tienen previsto reunirse el viernes con el juez Eugene Lynch, que está actuando como mediador en el conflicto. Una reunión a puerta cerrada, que todavía puede cancelarse y que será decisiva para el futuro de Napster.