El Gobierno checo se compromete a ayudar a los inversores españoles
La confianza en la solidez de la recuperación de la economía checa, una inequívoca apuesta por la integración en la UE en el plazo más breve posible y el compromiso de "ayudar a los inversores españoles" fueron los tres mensajes prioritarios que el presidente de la República Checa, Milos Zeman, transmitió ayer a los directivos de las más de 60 de las principales empresas españolas que asistieron al encuentro con la delegación oficial del país centroeuropeo, organizado por CEOE.
En la intervención inaugural de este encuentro, incluido en el programa oficial de su viaje a España, el jefe del Gobierno de la República Checa destacó el "éxito" que preside actualmente la cooperación económica hispano-checa, con la perspectiva de un nuevo desarrollo conforme "vaya avanzado la integración de la industria checa en las estructura empresariales europeas".
Milos Zeman, que viaja acompañado de sus ministros de Economía y Finanzas, Agricultura y Comercio e Industria, además de una amplia delegación empresarial, viaja con dos objetivos prioritarios: conseguir garantías del apoyo incondicional de España a la ampliación de la UE y dinamizar las inversiones españolas hacia la República Checa, país en el que existen interesantes oportunidades en los sectores de automoción, agroalimentación, infraestructuras y bienes de consumo. Además de en la segunda oleada de privatizaciones que afectará especialmente a la energía y las telecomunicaciones.
A este respecto, explicó a los empresarios asistentes el sistema de incentivos a la inversión vigente actualmente en la República Checa, que afecta tanto al ámbito fiscal como a los aranceles y el empleo. De esta forma los inversores extranjeros pueden beneficiarse de descuentos en el impuesto sobre la renta de las personas jurídicas durante 10 años (para las nuevas inversiones) o requerir un descuento fiscal parcial durante cinco años para las empresas ya establecidas.
También recibirán subvenciones a la creación de puestos de trabajo y para la formación, y tendrán la posibilidad de recibir parcelas para la construcción a precio simbólico y apoyo a las inversiones en redes de infraestructuras.
Para el primer ministro checo, el crecimiento económico que vive su país desde 1999 ha favorecido que después de dos años de recesión y estancamiento, el PIB vuelva a experimentar un crecimiento positivo, que para este año espera superior al 3%, y recordó un reciente informe de la Comisión Europea en el que se pone de manifiesto que es "nuestro país el que mas ha acelerado su preparación para la entrada en la UE" y que la credibilidad de un país "se evalúa también por las inversiones".
En este punto enfatizó que "la República Checa está hoy en primer lugar de Europa Central por lo que se refiere al volumen de las inversiones extranjeras".
Una exportación en alza y una presencia testimonial
El comercio bilateral entre España y la República Checa ha experimentado un fuerte crecimiento durante el año pasado, en el que las exportaciones españolas crecieron un 76,3%, hasta 105.964 millones de pesetas, y las importaciones aumentaron un 23,1%, alcanzando los 89.182 millones.
Por el contrario, las relaciones en el terreno de la inversión son casi testimoniales. Actualmente España significa sólo el 0,3% de la inversión extranjera en la República Checa y la participación de las empresas españolas en las privatizaciones en marcha ha sido inexistente.
A este respecto, el presidente de CEOE, José María Cuevas, recordó ayer que las inversiones en la República Checa disponen de importantes facilidades financieras provenientes de la CE, Banco Europeo de Inversiones, Banco Europeo de Reconstrucción y Desarrollo y FMI.