La fiscalía designada por Bush toma hoy las riendas del caso Microsoft
El juicio antimonopolio contra Microsoft entra hoy en una nueva fase con la presentación de "argumentos orales" ante un Tribunal de Apelaciones que ya dio la razón a la compañía en un caso parecido en 1998. Además, lo hace con nuevos responsables al frente del Departamento de Justicia.
George Bush ha nombrado fiscal general a John Ashcroft y responsable del Departamento Antimonopolio a Charles James. Dos abogados con fama de ser menos proclives al intervencionismo del Gobierno que la ex-fiscal general Janet Reno y su jefe antimonopolio Joe Klein.
Los analistas de Wall Street llevan meses especulando con que el nuevo equipo renuncie a la segregación forzosa de Microsoft y proponga un pacto amistoso. Y el propio James dijo el año pasado en televisión que los usuarios se han beneficiado de la ubicuidad de la plataforma Windows.
Sin embargo, los expertos legales creen poco probable un cambio radical en la posición del Gobierno y, haga lo que haga el Departamento de Justicia, los 19 Estados que participan en la demanda seguirán defendiendo el dictamen emitido por el juez Thomas Penfield Jackson.
La presentación de argumentos durará dos días (normalmente duran unos 15 minutos) y se centrará en algunos puntos claves: si Microsoft intentó mantener ilegalmente su monopolio en sistemas operativos para ordenadores, si violó la ley al integrar el navegador de Internet Explorer en Windows, si intentó monopolizar el negocio de navegadores, si debe segregarse la compañía y si el juez Jackson actuó o no con imparcialidad.