Motorola añade más presión a la telefonía móvil
Pocos o ningún argumento encontraron los inversores europeos durante la semana para animarse a invertir. La situación del Nasdaq -en mínimos de dos años-, los temores por la creciente deuda de las telecos y las turbulencias en los mercados emergentes, principalmente en Turquía, fueron una combinación desastrosa para los mercados. Varios índices de la región tocaron mínimos de 12 meses, entre ellos Londres, París, Milán y Amsterdam, que regresaron al nivel del principio de 1999. Y los expertos no vislumbran claras mejorías a corto plazo.
Una vez más, los sectores de tecnología y telecomunicaciones centraron la atención de los operadores y marcaron la pauta de comportamiento del mercado.
Especialmente notables fueron los retrocesos entre los fabricantes de equipos de comunicación después de que Alcatel y la estadounidense Qualcomm afirmaran que necesitarán más tiempo de lo previsto para poder ofrecer receptores y servicios con tecnología UMTS. A ello se unió la reducción de resultados previstos de Motorola y la rebaja en la perspectiva del sector de Goldman Sachs. La francesa retrocedió en la semana el 18%, y Nokia, el 20%.
La desastrosa colocación de Orange, que perdió el 0,7% en el periodo, siguió afectando a telecos, salvo avances puntuales. Vodafone cayó en los cinco días el 9,8%, y France Télécom, el 7,6%.
Los escasos avances correspondieron a las constructoras, firmas de alimentación y automovilísticas (excepto DaimlerChrysler, que cayó el 4%). æpermil;ste es el mejor sector del Stoxx en el año.