Airtel recibirá la primera partida de teléfonos del nuevo móvil en marzo de 2002
Airtel quiere convertirse en el primer operador del mundo en implantar la nueva telefonía móvil de tercera generación UMTS, y para ello está desarrollando "una estrategia muy ambiciosa", según aseguró a este diario el presidente de Nortel para Soluciones de Internet Móvil, Lloyd Carney, quien asistió al congreso mundial de telefonía móvil 3GSM, celebrado esta semana en Cannes.
"De todas las compañías, Airtel es la más agresiva del mundo y quiere ser la primera en sacar al mercado un servicio comercial de UMTS", añadió.
Nortel es uno de los suministradores de equipos de red de tercera generación de Airtel, pero también lo es Xfera. Fuera de España tiene contratos con AT&T, Cegetel (filial de Vivendi), BT Cellnet, One2One y T-Mobile (subsidiaria de Deutsche Telekom).
Lloyd aseguró que las primeras redes comerciales de UMTS no existirán hasta finales de este año o principios del próximo. Los primeros países en contar con ellas serán España y Reino Unido. En cualquier caso, lo que no habrá serán terminales, ya que, otra vez, "Airtel será la primera operadora en recibir teléfonos UMTS. El primer pedido será de Panasonic y lo recibirá en marzo de 2002".
El presidente de Nortel para Europa, Pascal Debon, confirmó esta fecha y añadió que Samsung también será uno de los suministradores de terminales de Airtel.
Nortel confía en la telefonía de tercera generación para compensar la caída del consumo en otras áreas de su negocio. Así, explicó que en los últimos nueves meses ha recibido contratos de UMTS por valor de 552.000 millones de pesetas y aseguró que su objetivo es tener el 25% del mercado de Internet móvil para 2003. Sólo el área de aplicación de la tercera generación moverá 11 billones de pesetas entre 2000 y 2005.
Retraso tecnológico
Nortel, sin duda, fue uno de los suministradores más optimistas en el congreso mundial de telefonía móvil, en el que la tercera generación celular fue la estrella de los debates, pero estuvo totalmente ausente de las demostraciones prácticas.
La cara opuesta al optimismo de Nortel la mostró Alcatel, que retrasó su previsión de llegada al mercado de terminales UMTS y aseguró que no estarán antes de 2004. Además, su despegue comercial no llegará hasta 2007.
La concreción de Alcatel no se dio en el resto de las empresas presentes en el congreso, que prefirieron evitar dar fechas. Casi todas, sin embargo, confían en que la llegada al mercado de UMTS sirva para compensar las elevadas inversiones que se han hecho hasta ahora en él, tanto en la tecnología como en la compra de licencias.
Tanto el presidente de Orange, Hans Snook, como el de NTT Docomo, Keiji Tachikawa, coincidieron en que la tercera generación llevará a que la telefonía celular tenga una penetración superior al 300%, gracias a su implantación en las máquinas. El directivo de la mayor operadora del mundo, Docomo, aseguró que en 2005 el tráfico de datos ya igualará al de voz.
La presencia española en el congreso de móvil brilló por su ausencia. Sólo Terra Mobile tenía previsto acudir, pero problemas logísticos de última hora lo impidieron.