El Gobierno catalán recorta el proyecto de ampliación de Baqueira
El proyecto de la estación de esquí de Baqueira de crecer en la vecina comarca del Pallars Sobirà (Lleida) no ha recibido el visto bueno de la Administración autonómica y el recorte aplicado es considerado por las partes implicadas como un "tijeretazo".
El proyecto ha pasado de las 153 nuevas hectáreas previstas de zona esquiable a sólo 90, con un recorte del 40%. Además, la zona de influencia que estaba previsto que creciera en 1.370 nuevas hectáreas se ha recortado a sólo 610, de las que 335 quedan dentro del Plan de Espacios de Interés Natural (PEIN) de la Generalitat.
Pese a que la posición de la Generalitat no ha satisfecho a nadie, Medio Ambiente considera que la decisión garantiza el desarrollo económico de la zona afectada, tal y como solicitaban los habitantes de la comarca del Pallars Sobirà, y lo hace de forma compatible con el respeto medioambiental que exigían los ecologistas.
A la estación de esquí, por su parte, le propone varias modificaciones al proyecto original, como el acceso a las pistas desde la carretera de la Bonaigua, y le recomienda ampliar la estación por la zona de la Peülla, dentro del PEIN.
El director general de la estación de esquí, Aureli Bisbe, afirma que "estamos ante un proyecto tan modificado y tan distinto al original que ahora nos hemos de replantear todo de nuevo y estudiar con detalle la decisión de la Generalitat para poder entrar en valoraciones".
El municipio de Alt æeuro;neu, donde la estación preveía su futuro crecimiento, no ha tardado en manifestar su disgusto. Su alcalde y diputado del PSC, Joaquim Llena, recuerda que el proyecto original fue negociado con Baqueira desde 1997 a 1999 y asegura que "es decepcionante que después de tantos meses de trabajo la opción elegida no tenga en cuenta el interés del territorio".
Características
El debate suscitado se explica por la envergadura del proyecto. Baqueira-Beret, propiedad de la aseguradora Catalana Occidente (60%), La Caixa (12%) y multitud de pequeños accionistas, había ideado un proyecto de ampliación con una previsión de inversión de 10.000 millones de pesetas en tres fases. Una cantidad suficiente para que la comarca del Pallars Sobirà, donde sus cerca de 5.500 habitantes están acostumbrados a vivir del turismo de verano, mimara el proyecto como "una esperanza de progreso" y un buen remedio para evitar la progresiva despoblación de la zona. Baqueira preveía también la creación de 200 puestos de trabajo fijos y una partida de 400 millones en medidas de corrección medioambiental.
Según el proyecto original, que no establecía área urbanizable, el beneficio para la comarca del Pallars Sobirà hubiera sido de 6.300 millones anuales teniendo en cuenta que las previsiones de Baqueira eran conseguir 200.000 nuevos esquiadores en la zona de ampliación.
Durante el ejercicio 1999-2000, Baqueira-Beret consiguió una facturación de 4.415 millones de pesetas, frente a los 3.739 millones del ejercicio 98-99. La estación fue visitada en la última temporada por 787.000 esquiadores.