La recesión de EE UU recortará el crecimiento en la UE
La sombra de la recesión en Estados Unidos llegará a Europa. Los analistas de seis influyentes institutos de análisis del Viejo Continente aseguraron ayer en Viena que la desaceleración nortea-mericana y la política restrictiva del BCE frenarán este año el crecimiento en la UE, donde puede rondar el 2,8%, frente al 3,3% estimado para 2000. Manejan una apreciación importante del euro hasta fin de año.
La desaceleración del crecimiento económico en EE UU y la "política monetaria más bien restrictiva de Europa" frenarán el crecimiento en la UE hasta un 2,8% este año, señala un estudio realizado por varios institutos independientes a instancias del Parlamento Europeo.
Según un comunicado del Instituto de Austria para Investigaciones Económicas (Wifo) y difundido ayer en Viena, la investigación fue realizada por el grupo Euroframe, integrado por los institutos ETLA (de Finlandia), OFCE (Francia), Prometeia (Italia), Niesr (Gran Bretaña), IfW y DIW (Alemania), además del Wifo.
Los expertos prevén que el euro continuará su revaluación frente al dólar y estiman que a finales de 2002 la relación podría ser de 1,05 dólares por euro.
Del Banco Central Europeo (BCE) esperan que reaccione este año con fuertes y rápidas reducciones de las tasas de interés si el enfriamiento de la economía estadounidense es más severo de lo esperado.
Para efectuar sus pronósticos, los analistas partieron de la base de que el aterrizaje de la economía de EE UU será suave y cuentan con que el crecimiento real de su producto interior bruto (PIB) alcance en 2001 un 2,6%. Al mismo tiempo, advierten de que una caída de los mercados bursátiles y de bienes inmuebles acarrearía un "freno aún mayor del consumo y las inversiones".
En este sentido, los expertos advierten que "el BCE debería reaccionar rápidamente bajando los intereses si se acentúan las señales desfavorables de Norteamérica".
El informe recuerda que en los países de la Unión Europea (UE) se registró el año pasado un fuerte crecimiento, de un 3,3%, gracias al ambiente optimista en el sector empresarial y de consumo, así como a una fuerte demanda de exportación. Pero el empeoramiento de las condiciones de marco internacionales "y una dirección más bien restrictiva" de la política europea de intereses provocan ahora un debilitamiento del crecimiento.
Para este año, se espera un crecimiento medio de un 2,8%, tanto para los países de la UE como los socios comunitarios que integran la zona euro, índice que podría repetirse en 2002.
Aunque ese nivel es inferior 0,4 puntos a las expectativas de la Comisión Europea en sus pronósticos de otoño, garantiza aún un "crecimiento suficientemente fuerte como para posibilitar nuevas reducciones del desempleo y que siga incrementándose el índice de ocupación", se asevera en el informe.
Asimismo, los expertos consideran posible que la tasa de desempleo en la UE baje hasta una media de un 7,9% en 2001 y de un 7,7% en 2002, con un aumento de la ocupación un 1,2% y un 1%, respectivamente.
Debido a los altos precios del petróleo, la inflación superaría en la UE este año el 2,1%, mientras que en el año 2002 se reduciría a un 1,6%.
Los institutos esperan que cualquier debilitamiento de la economía europea sea amortiguado por la consolidación presupuestaria lograda en la UE en los últimos años. Consideran que no serán necesarias medidas adicionales en este sentido, sino que, por el contrario, la reducción de impuestos de varios miembros tenga efectos expansivos.
Los institutos aconsejan que los aumentos salariales se orienten "al aumento de la productividad y al objetivo del BCE en cuanto al índice de inflación". Son partidarios de incrementar las inversiones en nuevas tecnologías y de que se extienda la política activa del mercado laboral.
Con respecto a España, los institutos prevén que su crecimiento económico supere la media de los socios de la UE en 2001, alcanzando un 3,1%, si bien en 2002 ese índice descendería hasta el 2,5%.
Duisenberg y Prodi ultiman la entrada del euro
El presidente de la Comisión Europea, Romano Prodi, acordó ayer con el presidente del Banco Central Europeo (BCE), Wim Duisenberg, establecer un diálogo más fluido entre estas instituciones y el eurogrupo. A la salida de la reunión en la sede de la entidad emisora en Francfort, Prodi dijo que las conversaciones con Duisenberg tuvieron como objetivo coordinar mejor el trabajo trilateral y poner más énfasis en la campaña de información sobre la introducción del euro.
Prodi aseguró que la reu-nión, que tuvo lugar a petición de la Comisión Europea, no debía servir para ponerse de acuerdo sobre la economía europea, sobre la que hay "puntos de vista similares", sino para lograr una mejor colaboración con el eurobanco en temas como la campaña para la introducción del euro.
Esta campaña se hará en varias fases y en su último periodo tendrá como misión informar a los consumidores sobre el diseño y valor de los billetes, así como sobre otros detalles referidos a la entrada en curso legal de la nueva moneda.
El comercio al por menor crece sólo el 1,2% en la zona euro
La desaceleración económica que vive Europa en los últimos meses comienza a notarse en todos los sectores, incluido el comercio. En noviembre de 2000, el volumen del comercio al por menor aumentó sólo un 1,2% en la zona euro, con respecto al mismo mes del ejercicio anterior, y un 1,8% en el conjunto de la Unión Europea (UE), según los datos publicados ayer por la oficina de estadística comunitaria, Eurostat.
En noviembre, los mayores incrementos de ventas se registraron en el sector de equipamiento del hogar, tanto en la zona euro (4,1%) como en la UE (5%).
La venta de bienes ligados a la alimentación, las bebidas y el tabaco crecieron un 1,4% en la zona euro y un 1,2% en la UE, mientras que en el textil se redujo un 0,3% en la zona euro y aumentó un 1,5% en los Quince.
Por Estados miembros, el volumen de ventas aumentó en todos, salvo en Italia (-0,9 %) y en Alemania (-0,4%). Irlanda registró un crecimiento espectacular (9,2%), ligado al buen momento de su coyuntura económica.
Disminuye el volumen de reservas de la Unión
El volumen de reservas en moneda extranjera en el eurosistema se redujo en 100 millones de euros en la última semana, hasta los 260.800 millones de euros, informó ayer el Banco Central Europeo (BCE). Por su parte, las reservas en valores negociables emitidas en la moneda europea por residentes del área se redujeron en 700 millones de euros hasta los 27.500 millones de euros y la cifra de billetes en circulación descendió también en 1.600 millones de euros, hasta los 357.100 millones de euros. En la misma línea, descendió el préstamo neto concedido a las entidades financieras.