Ferrovial y Acciona pujarán juntas en Francia por la primera autopista privada
Ferrovial y Acciona se han aliado para pujar juntos por el primer tramo de autopista de Francia que sale a concurso para ser construido y explotado por capital privado. Se trata de un viaducto de 2,5 kilómetros y pilares de hasta 342 metros, más altos que la Torre Eiffel, una inversión total de 80.000 millones y 60 años de concesión.
Ferrovial, a través de Cintra, filial especializada en la licitación y gestión de concesiones, y el grupo Acciona han decidido aliarse para acudir al concurso de concesión de la construcción, financiación, mantenimiento y explotación de un viaducto de gran longitud y altura sobre el río Tarn en Millau, en el sureste de Francia.
Se trata, además, del primer tramo de autopista que sale a concurso en Francia bajo el sistema tradicional de concesión a una empresa privada, según fuentes de ese consorcio. En Francia existe una red de autopistas de peaje, pero está controlada por empresas públicas. También existen tramos explotados por sociedades privadas pero que no han financiado la construcción.
El proyecto representa una inversión de 80.000 millones de pesetas y completará la Autopista A75, actualmente en construcción entre Béziers y Clermont-Ferrand, el itinerario más corto entre Barcelona y París.
Dura competencia
El período de diseño y construcción previsto es de cinco años, por lo que la puesta en marcha de la autopista se estima para principios de 2007. El consorcio ganador mantendrá y explotará la autopista por un periodo de concesión de unos 60 años.
La concesión comprende, también, los terrenos e instalaciones del área troncal de St. Germain, situada a seis km al norte del viaducto. El tráfico actual del corredor (en Millau), medido en IMD (Intensidad Media Diaria), es de 13.000 vehículos equivalentes.
El Viaducto de Millau, un proyecto diseñado por Norman Foster, incluye la ejecución de una estructura que el consorcio español tilda de excepcional. Está configurada por ocho vanos, seis de ellos de 342 metros, es decir, más altos que la Torre Eiffel. El puente es de tipo atirantado, con siete pilas de altura variable.
Ferrovial, a través de su filial de concesiones Cintra, y Acciona, junto con su filial constructora Necso, lideran el consorcio, en el que se reparten cerca del 80% del capital. El grupo se completa con la constructora francesa Générale Routière (10%) y VIA/GTI (7,5%), primera empresa francesa concesionaria de transportes.
En cuanto al contrato de construcción a que daría lugar la concesión, Ferrovial Agroman, filial constructora de Ferrovial, Necso, filial constructora de Acciona, y Générale Routière han forman una Unión Temporal de Empresas en la que las dos primeras controla el 90% a partes iguales. El resto es de la firma francesa. Sólo la inversión en construcción y obra civil de este proyecto asciende aproximadamente a 74.000 millones de pesetas.
El grupo liderado por Ferrovial y Acciona compite con las ofertas presentadas por otros dos consorcios: el formado por el Grupo Eiffage y Fougerolles, y sobre todo con el constituido por las constructoras Bouygues, Vinci (fruto de la fusión de Dumez GTM y SGE), las dos primeras de la clasificación mundial del sector, Egis, la empresa Autoroutes du Sud de la France (la sociedad pública de autopistas de la región), la italiana Autostrade, que explota toda la red de autopistas de Italia, y Tofinso (una caja de ahorros regional).
Pese a la potencia de este grupo, el consorcio español considera su oferta competitiva y cree tener posibilidad de ganar. El mercado de la construcción francés de obra pública ha sido hasta ahora de muy difícil acceso para las firmas españoles.