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Quintiliano Pérez Bonilla dimite como director general de Ganadería

Quintiliano Pérez Bonilla, director general de Ganadería, logró zafarse hace dos años del llamado fraude del lino. Pero el desgaste político del Gobierno no fue entonces el de hoy, y ayer el director general se vio obligado a dimitir. La despedida de Pérez Bonilla coincidió con la confirmación de los dos primeros casos de EEB en Asturias.

El director general de Ganadería del Ministerio de Agricultura, Quintiliano Pérez Bonilla, presentó el cese a petición propia, según anunció el portavoz del Gobierno, Pío Cabanillas, durante la conferencia de prensa posterior al Consejo de Ministros.

Cabanillas explicó que la investigación que se abrió el pasado miércoles por el Ministerio de Agricultura ha concluido sin encontrar ninguna incompatibilidad y que en el ejercicio de su cargo no ha tomado decisión alguna que haya beneficiado directamente a sus familiares.

El portavoz detalló que, a raíz de esta investigación, ha sido el propio director general quien ha presentado su dimisión y resaltó que el Gobierno considera que Pérez Bonilla es "una persona absolutamente intachable y, además, agradece la dilatada labor que ha realizado en el desempeño de su cargo". Añadió que el Gobierno espera contar con Pérez Bonilla para cargos de responsabilidad en otras áreas.

El ex director general ya fue investigado hace dos años cuando se desveló la trama del fraude del lino, el cobro ficticio de subvenciones por cultivar un lino de calidad tan pésima que tras su recogida se quemaba. Entonces, se conoció que la esposa de Pérez Bonilla había cobrado 25 millones de la UE en subvenciones.

Pérez Bonilla explicó hace unos días que su mujer, María Jesús Muñoz Bernal, es empresaria agrícola y se dedica a esta actividad y que él tiene una explotación ganadera heredada y que, cuando en 1996 fue nombrado director general de Ganadería, en la declaración de altos cargos incluyó, de forma voluntaria, el patrimonio de su mujer.

Lejos de amainar, la crisis de las vacas locas se recrudece cada día que pasa. También se conoció ayer que dos de los cuatro casos aparecidos esta semana en Asturias han dado positivo. La res de Castilla y León, procedente de Ávila, sigue en proceso de estudio en el Centro Nacional de Referencia de Zaragoza.

Con estos dos casos se eleva a siete el número de reses afectadas por el mal de las vacas locas en España, tres en Galicia, dos en Castilla y León y otros dos en Asturias. Estas reses pertenecían a una granja de Siero con once reses y a otra de Piloña, con 21 animales, que serán sacrificados en un plazo de dos semanas.

Por otro lado, la organización agraria UPA anunció ayer que recurrirá ante el Tribunal Contencioso-Administrativo la declaración jurada a que están obligados los ganaderos que lleven las reses al matadero y recordó que la pérdidas del sector ganadero ascienden ya a 25.000 millones de pesetas. En este mismo sentido, Asaja reclamó que el descenso de los precios en origen, cifrado en un 40 %, se repercuta en el precio de venta al público, que sólo ha bajado un 0,5%.

La implantación de una tasa para costear la crisis de la EEB, cuyo alcance impositivo aún se desconoce, sigue provocando reacciones.

El ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, aseguró que el impuesto "no gravará necesariamente al consumidor" y Confecarne advirtió de que esta medida recaerá en los ganaderos, porque los márgenes de los mataderos no permitirá asumir un nuevo impuesto.

 

Badiola y dos cientíýcos más asesorarán a Mariano Rajoy

El director del Centro Nacional de Referencia sobre Encefalopatías Espongiformes Transmisibles, Juan José Badiola, y los especialistas Isidro Ferrer Abisanda y Alberto Rabano Gutiérrez, se incorporarán como asesores científicos al Comité Especial contra el mal de la vacas locas que coordina el vicepresidente primero del Gobierno, Mariano Rajoy.

Ferrer Abisanda es doctor en Medicina y responsable de la Unidad de Neuropatología del Hospital Príncipe de España, en Hospitalet de Llobregat. También es miembro de la Ejecutiva de la Sociedad Internacional de Neuropatología. Ha dirigido 29 tesis doctorales y cuenta en su haber con más de 300 publicaciones en revistas especializadas nacionales e internacionales. Por su parte, Alberto Rabano Gutiérrez es también neuropatólogo, director del Instituto de Investigación de la Fundación Hospital de Alcorcón, el centro de referencia para el diagnóstico postmorten de las enfermedades provocadas por priones.

Por otro lado, La nueva ministra alemana de Agricultura, Renate Künast, anunció que se hará el test a todas las reses mayores de 24 meses y, a medio plazo, se introducirá la obligatoriedad de pruebas para todas las cabezas de ganado.

 

Cruz Roja pone restricciones a los donantes de sangre

Cruz Roja Española anunció ayer que interrumpirá el uso de sangre donada por antiguos residentes de Gran Bretaña hasta determinar si está libre de la variante humana de la enfermedad de las vacas locas.

Carmen Martín, directora del departamento de salud de la Cruz Roja, en declaraciones a RNE, dijo que "pensamos excluir estas donaciones hasta que se conozcan datos más fiables o surja una evidencia científica de si la EEB puede ser transmitida por la sangre".

Esta decisión se toma después de que la Cruz Roja de Estados Unidos impusiera esta semana nuevas restricciones en las donaciones de sangre debido a la creciente preocupación por la encefalopatía espongiforme bovina (EEB) en Europa. En España no ha habido casos de la variante humana, pero en Gran Bretaña más de 80 personas han muerto de esa enfermedad y al menos otras dos han fallecido en Francia.

Por su parte, la Comisión Nacional de Hemoterapia y la Federación Nacional de Donantes de Sangre no consideran necesario restringir las donaciones de sangre y señalan que no hay evidencias científicas que avalen el temor del contagio a humanos del mal de las vacas locas a través de la donación de sangre.

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