California sufre cortes de luz y se agrava la deuda de las eléctricas
California, la región más rica del planeta en términos de poder adquisitivo de los habitantes, sufrió ayer interrupciones en el suministro de energía eléctrica en diferentes partes del Estado.
El estado de emergencia, que había sido declarado la víspera por el regulador de la red eléctrica de California, comenzó ayer a activarse con una rotación geográfica de los cortes de luz, debido a que las reservas de generación caen a menos del 1,5% de la capacidad disponible en la red.
El presidente y consejero delegado del organismo regulador (Independent System Operator), Terry Winter, anunció en una rueda de prensa que los cortes de suministro durarían casi todo el día y alcanzarían a Silicon Valley, donde se concentran los fabricantes de ordenadores y equipos de electrónica.
Los políticos del Estado consiguieron ayer que la cámara de representantes aprobase una ley urgente que permite a los distribuidores de electricidad cerrar contratos a largo plazo con los productores, lo que deja margen para comprar electricidad a precios estables. La antigua ley no permitía a los distribuidores repercutir en los clientes particulares las subidas de precios de los mayoristas, que con motivo del alza del precio del petróleo encarecieron mucho el kilovatio.
En plena crisis, la agencia de clasificación de riesgo financiero Standard and Poor's ha clasificado la deuda emitida por las entidades al igual que los bonos de alto riesgo, conocidos como bonos basura.
Las sociedades afectadas son Pacific Gas Electric y sus filiales, y Edison International y su filial Southern California Edison, ambas con calificación CC.
La agencia ya había rebajado las calificaciones hace dos semanas, pero tras anunciar Southern California que no podrá hacer frente al reembolso de su deuda, supera los 4.500 millones de dólares (más de 800.000 millones de pesetas), las rebajó de nuevo.