La CMT critica las medidas del Gobierno para liberalizar la telefonía móvil

La Comisión del Mercado de las Telecomunicaciones (CMT) y el Gobierno tienen opiniones muy dispares sobre las medidas a tomar para mejorar la competencia en la telefonía móvil. El órgano regulador del sector cuestiona, en un informe específico sobre el asunto, las últimas iniciativas del Ejecutivo y asegura, en contra de las tesis gubernamentales, que la tecnología UMTS puede retrasarse, "ya que no se esperan terminales hasta finales de 2001".

El informe de la CMT sobre la mejor manera de dotar de mayor competencia a la telefonía móvil es fruto de una extensa consulta pública entre los operadores y de meses de trabajo. Las conclusiones se han expuesto en un documento de casi 200 páginas, que profundiza en los puntos débiles del sector y en las mejoras que deberían realizarse. Y el resultado contradice buena parte de las últimas medidas que ha adoptado el Ejecutivo para liberalizar la telefonía móvil.

La principal contradicción está en la entrada en funcionamiento de la telefonía móvil de tercera generación UMTS. La CMT reconoce que "no se esperan terminales UMTS hasta finales de 2001" y que esta tecnología "aún está en fase de desarrollo que le puede retrasar". Esta afirmación se produce sólo días después de que Telefónica Móviles España, a través de su consejero delegado, fuera la primera operadora en reconocer públicamente que el nuevo móvil no estará disponible este año. Mientras tanto, el Gobierno sigue manteniendo como fecha para la puesta en servicio de UMTS el 1 de agosto.

La CMT también cuestiona la decisión del Gobierno de conceder dos nuevas licencias celulares de GSM, lo que resulta "paradójico, cuando ya se ha producido la concesión de licencias de tercera generación". El lanzamiento de UMTS "haría disminuir de forma drástica el valor intrínseco de las nuevas concesiones", explica la comisión, "y los nuevos operadores se verían obligados a realizar inversiones en redes cuya tecnología, si bien no puede considerarse como obsoleta, sí ha sido superada por una generación más avanzada y con más posibilidades de negocio".

La conclusión de organismo regulador es que hubiera sido más conveniente conceder seis licencias UMTS, en lugar de cuatro. Es más, la CMT advierte que "el riesgo de retraso en la implantación efectiva de la tercera generación" se puede ver reforzado por las dos nuevas adjudicaciones en GSM, "si no van acompañadas de una expectativa a los operadores concesionarios para prestar servicios en un plazo razonable con la nueva tecnología GPRS" (la llamada generación 2,5).

El informe de la CMT no hace ninguna referencia explícita a la tasa que ha impuesto el Gobierno por la utilización del espectro radioeléctrico y que gravará a las operadoras de móviles con 140.000 millones este año. Pero sí hace una referencia indirecta. Al enumerar los principios que debe regir toda actuación regulatoria hace hincapié en que la intervención debe ser mínima y en que las medidas deben buscar el beneficio para los usuarios, a través de la reducción de los precios de la telefonía móvil.

A pesar de las diferencias de criterio con el Ejecutivo expuestas en el informe, la CMT deja claro en la presentación del documento que la finalidad "no es la de elevar contrapropuestas al Gobierno", sino "ofrecer una rigurosa y concienzuda descripción de la situación del mercado de los móviles".

Por otra parte, el organismo regulador ha desestimado los recursos que interpusieron Astel (la patronal del sector) y Uni2 contra los precios de interconexión que tienen que pagar a Telefónica y que se establecieron en la oferta de interconexión de referencia para 2000.

 

Precios similares en las tres operadoras y multitud de ofertas

El regulador de las telecomunicaciones alaba la forma en la que se ha desarrollado la competencia en un sector, como el de la telefonía móvil, muy poco regulado hasta el momento. Con lo que no se muestra tan optimista es con los precios. En varias clasificaciones deja claro que las tarifas de Telefónica Móviles y de Airtel son de las más caras de Europa (la más elevada es la de Vodafone). Y también constata que hay una paz de precios entre los operadores españoles.

Bajo el epígrafe "Inexistencia de diferencias apreciables en precios entre las ofertas de los operadores", el regulador concluye que "todos los operadores presentes en el mercado siguen la misma estructura de precios" y que la diversidad de planes de precios es solo "aparente".

A la vez, la CMT ha cifrado en cerca de 100 las distintas ofertas que las telefónicas han puesto en el mercado, lo que reduce "la transparencia" e introduce "confusión" en el usuario a la hora de conocer exactamente los precios que va a pagar.

Como no podía ser de otra forma, la comisión define como "espectacular" el crecimiento de la telefonía móvil en España, aunque alerta sobre los síntomas de saturación. Con los datos que ha recogido, señala que el techo de penetración puede estar entre el 70% y el 75% de la población y España está en estos momentos en poco más del 60%. Por eso, considera prioritario la introducción de nuevas tecnologías que permitan facturar por tráfico de datos, sobre todo, tras el "fracaso" del WAP.

 

Móviles rebaja por su cuenta la tarifa a las empresas de telefonía fija

Telefónica Móviles ha dado marcha atrás y ha decidido reiterar a las operadoras de telefonía fija su oferta de rebajar un 10,75% el precio de interconexión que les cobra por terminar en las redes móviles (en un teléfono celular) las llamadas que se originan en un fijo. La compañía envió ayer una carta a todas las telefónicas en la que asegura que mantiene la rebaja, que será retroactiva desde el 15 de enero.

Móviles retiró su oferta el mismo día 15 de enero, cuando tenía que entrar en vigor, debido a una resolución de la Comisión del Mercado de las Telecomunicaciones que obligaba a Telefónica de España a reducir los precios de las llamadas de fijo a móvil a todos los clientes finales, independientemente del operador celular que terminara la conexión. Móviles y Airtel tenían pensado rebajar sus tarifas de interconexión, pero no así Amena, de forma que Telefónica se exponía a perder dinero con las concesiones al tercer operador celular.

Usuario final

Telefónica Móviles asegura que la iniciativa actual se debe a su "sensibilidad con los precios al cliente final". Queda por ver ahora qué hacen los operadores de telefonía fija, si repercuten la rebaja y reducen la tarifa para los usuarios o si mantienen precios y se guardan el margen para ellas. Fuentes de la compañía explican que su deseo es que "se traslade cuanto antes al usuario".

Quien no va a repercutir, por el momento, la rebaja es Telefónica de España. Fuentes de la empresa aseguran que lo harán "cuando nos lo permitan", lo que significa que esperarán a que Amena recorte también sus precios o a que la CMT les permita facturar distinto por las llamadas a los móviles de Telefónica y de Airtel que a los de Amena.