"Vamos a abordar un plan inversor para modernizar toda la red"
Tras dos años en los que se ha dado prioridad a las mejoras en la gestión, Paradores inicia un proceso para actualizar su red. La nueva etapa está siendo pilotada por Ana Isabel Mariño, que se ha convertido en la primera mujer que ocupa la presidencia de Paradores en los 72 años de historia de la compañía.
La presidenta de Paradores de Turismo en su despacho oficial./Isabel Arriero
Paradores va a dedicar los primeros años del siglo XXI a poner al día su red de establecimientos. El grupo iniciará un proceso de inversión en el que se modernizarán las instalaciones de los hoteles y se incorporarán nuevas tecnologías.
El año pasado el objetivo de beneficio estaba en 2.065 millones y para 2001 es de 2.067 millones. ¿A qué se debe este estancamiento, que se produce cuando la cifra de negocio crece un 5,5%?
Debido a que no vamos a subir los precios, ese 5% que tenemos previsto para el año 2001 se refiere fundamentalmente al aumento de actividad y diversificación del negocio.
¿Qué tipo de diversificación?
Hemos abierto una línea de tiendas, ya hay algunas abiertas y tenemos proyectos para abrir en los próximos años 35 más. En ellas comercializamos productos marca Paradores. Intentamos que en cada parador haya una representación de la artesanía local, igual que hay una representación en todos los paradores de la gastronomía. Además, estamos aplicando otra fórmula para intentar diversificar e incrementar la actividad y que se dirige a las empresas. Es decir, vamos a trabajar el segmento empresarial.
¿De dónde procede el aumento de la actividad?
Procede de los tres nuevos paradores, aunque no sólo de eso. Ese aumento se produce también por la mejora en la ocupación. La media de ocupación de Paradores ha pasado del 59% en 1997 a cerca de un 75% en 2000. Además nos hemos puesto este año el reto de aumentar la actividad un 5%.
¿Cómo pretenden conseguir ese crecimiento de la actividad?
Desestacionalizando la demanda de nuestra clientela. Aplicaremos políticas comerciales agresivas, para provocar la presencia de turistas en los días en que tenemos un menor índice de ocupación. El español, normalmente, viaja a los paradores los fines de semana. Entonces, tenemos que desestacionalizar nuestra demanda de tal manera que vengan de domingo a jueves. Habrá políticas comerciales más agresivas en promociones.
En varias ocasiones se ha anunciado públicamente que los nuevos paradores serán inteligentes, pero ¿en qué consiste un parador inteligente?
El primer proyecto que ya ha comunicado el secretario de Estado de Comercio y Turismo, Juan Costa, es el de Limpias [Cantabria]. Consiste fundamentalmente en optimizar la presencia del cliente en el parador, aparte de optimizar los sistemas, de tal manera que hasta el aire que se respire en el parador sea mucho más agradable. Por ejemplo, que tenga la humedad adecuada. Que el cliente, desde su habitación, pueda solucionar todo, pero no sólo el check-out [liquidación de la cuenta] y todas esas cosas que ya se hacen en otros hoteles. Que pueda tener un conocimiento específico, claro y concreto de las visitas que puede hacer en la zona y que no sea sólo el típico folleto. Y gestionar, sobre todo, con criterios de economía sostenible.
Estas mejoras ¿se introducirán sólo en los nuevos paradores o se extenderán también a los ya existentes?
Vamos a intentar que en todos aquellos paradores que tenemos en proceso de reforma y de modernización, se incorporen estos sistemas. Es posible que no se pueda hacer en todos, especialmente en los edificios históricos, pero sí es nuestra intención que poco a poco se vayan incorporando esas mejoras en lo que sea posible.
¿Se va a realizar algún cambio en el pliego de concesión del Estado?
No. El pliego de concesión está aún vigente. Las relaciones con Turespaña son estupendas y no prevemos cambiarlo. Las concesiones para gestionar los hoteles siguen estando a 50 años. Pero el pliego de concesión, que sirve para enmarcar las relaciones con nuestros caseros, está vivo, es algo dinámico. Además, sirve de marco para la coordinación administrativa y de gestión. Probablemente en esos ámbitos sí que se puede ir mejorando para que las relaciones sean mucho más dinámicas.
¿Sigue pidiendo el Estado que Paradores reinvierta en los hoteles?
Sí. En el pliego de concesión hay fijada una cantidad que es obligatoria y que nosotros aceptamos, para invertir en la red. No obstante, la política actual de Paradores es la de modernizar la red e invertir. De hecho, ha habido dos fases en estos años. En una primera fase se intentó superar la aguda crisis que sufrió la empresa entre 1993 y 1995. Mi antecesor en el cargo lo ha conseguido. Ahora estamos en la segunda fase que consiste en incorporar a una red histórica como la nuestra, que tiene 72 años, a los retos del siglo XXI. Los clientes generan una serie de expectativas hacia nosotros que se van modificando con el tiempo y nosotros tenemos que atenderlas y cubrirlas.
¿Qué se va a hacer para modernizar Paradores?
Va a haber un plan de inversión en el que se incluye, no sólo, la modernización de la red, porque tenemos 85 paradores y hay edificios que tienen diferentes niveles de estado de mantenimiento y conservación. Pero, para empezar, modernizarlos y después incorporar las nuevas tecnologías a toda la red. Vamos a crear un departamento de investigación y desarrollo para mejorar la oferta y la calidad que tenemos en gastronomía y el resto de servicios. Además, se incorporarán pequeños centros de negocios con fax, ordenador y conexiones a Internet.
¿Van a utilizar fondos propios para ese plan inversor y modernizador?
Estamos muy capitalizados, por encima de la media del sector. A finales de 2000, los recursos propios de Paradores estaban cercanos a los 18.000 millones. Tenemos una buena tesorería y por eso la política que voy a intentar imprimir es la de modernizar la red y la de invertir. No repartimos dividendo, todos los beneficios se quedan en la empresa y ahora los vamos a reinvertir. Quiero que el ritmo de inversión sea rápido, porque hemos pasado de un índice de ocupación en el año 1995 del 53% a un índice que este año estará en torno al 76%. Eso significa un mayor desgaste en las instalaciones, por eso quiero que el proceso de puesta al día de los paradores sea rápido.
A la búsqueda de nuevos clientes entre jóvenes y extranjeros
Ana Isabel Mariño asegura que el aumento de la actividad procederá de una mayor ocupación y para ello se acometerá un plan comercial con acciones como "por ejemplo, una campaña muy importante con los jóvenes. Se va a intentar provocar la escapada joven para que conozcan Paradores, que es una red con edificios singulares, naturaleza, pero a los que ellos también pueden acercarse. El objetivo es que vean que los paradores son asequibles para ellos".
La primera mujer que preside Paradores indica que la apertura de nuevos mercados emisores de turistas es fundamental para la empresa. "Menos de la mitad de la clientela está compuesta por viajeros extranjeros y éstos siguen creciendo. Las políticas que se han desarrollado estos dos últimos años han tenido sus efectos. Se están recibiendo turistas extranjeros lo que sirve para desestacionalizar, porque vienen en épocas en las que el turista español no accede a Paradores".