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Miguel Durán y Cirsa compran una lotería argentina al Grupo Franco

El ex presidente de la ONCE Miguel Durán y Cirsa han comprado a Recreativos Franco el 80% de la lotería argentina La Solidaria. Al mismo tiempo, los dos principales grupos de juego españoles han enterrado sus diferencias y han acordado unificar las patronales de operadores de tragaperras.

Miguel Durán, ex presidente de la ONCE, ha alcanzado un doble acuerdo con Recreativos Franco y Cirsa. Por un lado, Durán y Cirsa han comprado a Recreativos Franco el 80% de la lotería argentina La Solidaria que venden minusválidos en Buenos Aires.

En segundo lugar, Durán ha logrado que Cirsa y Recreativos Franco, hasta ahora competidores con fuertes diferencias, inicien el proceso de unificación de las dos asociaciones españolas de operadores de máquinas tragaperras para defender conjuntamente sus intereses.

Según el acuerdo al que han llegado las tres partes respecto a la lotería, Recreativos Franco vende a Miguel Duran el 80% que tenía en la sociedad Empresa Gejinsa España (titular de La Solidaria). La operación se realiza a través de una compra aplazada que está avalada por Cirsa.

En una segunda fase que se llevará a cabo a lo largo de este año, Durán venderá al grupo de juego catalán el 50% de Gejinsa. De esta forma, Durán eleva su participación del 20% actual al 50% y los hermanos Franco dan paso a Manuel Lao.

Según Javier Carro, director general de Recreativos Franco, la operación se enmarca dentro de la estrategia de "concentración en nuestros negocios tradicionales, es decir, en bingos, máquinas recreativas y nuevas tecnologías".

Los propietarios de la empresa de juego madrileña sabían desde el principio que Cirsa estaba detrás de la transacción que encabeza Miguel Durán. Según Carro, con esta venta Recreativos Franco recupera las inversiones realizadas en el proyecto. Ninguna de las partes quiso desvelar el importe de la transacción.

La lotería argentina La Solidaria es un proyecto emergente que nació en marzo de 2000. La intención de Miguel Durán y Cirsa es aplicar la experiencia del ex presidente de la ONCE en el mercado argentino, aunque con la diferencia de que se trata de un proyecto privado. Actualmente, La Solidaria cuenta con unos 500 vendedores minusválidos (no sólo ciegos) que venden boletos en Buenos Aires capital federal con un premio máximo equivalente a unos cuatro millones de pesetas.

Respecto a la creación de una única asociación sectorial, Cirsa y Franco han acordado que Durán sea el secretario general ejecutivo y existan dos copresidentes. "El objetivo es lograr un interlocutor único ante la Administración para defender los intereses del sector, independientemente de que seamos competidores", señaló Carro.

La nueva asociación agrupará a los operadores de máquinas tragaperras, pero los fabricantes de máquinas continuarán agrupados en la patronal Facomare, según fuentes de Cirsa.

 

Manuel Lao reorganiza la cúpula de la compañía

El presidente de Cirsa Business Corporation, Manuel Lao, ha reorganizado la cúpula directiva del grupo. El hasta ahora consejero delegado de la compañía, Esteban Borrell, ha abandonado su cargo y sus funciones han sido asumidas por el propio Manuel Lao, su hijo -que desempeña el cargo de vicepresidente- y Andreu Morell, que se mantiene como director general del grupo pero con sus funciones ampliadas. Según un portavoz de Cirsa, Esteban Borrell, sigue vinculado al grupo en categoría de asesor personal del presidente. "Borrell es una persona próxima a la jubilación que mantendrá su relación con el grupo", señaló.

Por otro lado, el acuerdo alcanzado con Miguel Durán en Argentina supone un acercamiento a una persona que hasta ahora era considerada uno de los principales asesores de Recreativos Franco en el tema de loterías.

La intención de Cirsa es aprovechar la experiencia del expresidente de la Once para iniciar una lotería en Argentina que luego "podría extenderse por todo el continente", explicó el portavoz de Cirsa.

Además, situar a Durán al frente de la nueva asociación de operadores de máquinas permitirá a Cirsa y a Franco mayor coordinación en la defensa de sus intereses.

Cirsa Business Corporation cerró 1999 con unas ventas de 170 millones de pesetas, mientras que Franco espera cerrar 2000 con 148.000 millones, un 6% más que en el ejercicio 1999.

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