Las claves: el enérgico aleteo de los aranceles puede provocar huracanes
Entre golpe y golpe a la pelota de golf, Donald Trump saca tiempo para lanzar una nueva amenaza
Entre golpe y golpe a la pelota de golf, Donald Trump saca tiempo para lanzar una nueva amenaza arancelaria. Mientras negocia in extremis con Suiza o India, agraciados con tarifas especialmente altas, ha puesto énfasis en los chips, a fin de que la fabricación de los aparatos electrónicos se relocalice en la medida de lo posible en Estados Unidos. Ya está consiguiendo algunos hitos, en particular con Apple, y está atrayendo a gigantes de los semiconductores como TSMC. Fabricar en EE UU aumentará, en principio, los costes laborales, lo cual repercutirá en los precios de los productos y por tanto en la inflación (no solo en la que sufran los propios estadounidenses, puesto que las empresas intentarán repartirlos por todos sus mercados). A cambio, los trabajadores asiáticos tendrán menos poder de negociación, puesto que habrá menos ofertas de empleo, lo cual puede reducir los costes de las compañías que sigan produciendo allí, y hacer más competitivos sus artículos. Aunque eso, a su vez, puede compensarse con el declive demográfico chino, por ejemplo. El enérgico aleteo de los aranceles puede provocar huracanes, y el futuro nunca suele ser como lo esperamos.
775 hoteles como 775 soles para un nuevo panorama
El sector turístico lleva clamando años por una transformación del panorama hacia un modelo que huya de la masificación para abrazar la calidad. O dicho en otras palabras, que sea más caro. Así que en los próximos años va a construir ni más ni menos que 775 hoteles. Al final va a resultar que la masificación va a ser solo de eso, de hoteles, aunque cualquiera que haya pisado una zona turística este verano pueda discrepar. Lo que sí está conseguido es lo de la calidad, visto que irse de vacaciones a Mallorca es ya más caro que cruzar medio mundo para darse un baño en algún mar exótico de aguas cristalinas.
Precios del norte con salarios del sur...pero mejorando
Los trabajadores en España llevan algunos trimestres recuperando –que no ganando– poder adquisitivo tras el bocado que supuso la crisis de precios entre 2021 y 2023. Puede que la inflación se haya moderado a tasas aceptables, pero eso no significa que lo hayan hecho los precios, y tampoco que los salarios estén subiendo como para que lo anterior no importe. La cuestión de los salarios sigue siendo uno de los grandes temas económicos de las pasadas dos décadas, pero es difícil de abordar. Resulta que, en una economía aparentemente motor de Europa –”como un cohete”, que decía el presidente– estamos empezando a ver un fenómeno peligroso: precios (especialmente de la vivienda) de nuestros vecinos del norte, con salarios de hace 15 años. Un fenómeno peligroso cuando menos.
La frase
No sé cómo aceptará nuestro pueblo la compra a EE UU de aviones F-35 a precios superiores a los previstos, sobre todo tras la subida repentina de los aranceles. El Gobierno debe valorar la suspensión del contrato y asumir las posibles pérdidasHans-Peter Portmann, diputado del Consejo Nacional de Suiza
Varios y variados trucos infalibles para estar sanos
Dentro de los variados mantras del bienestar , estacan la alimentación, el descanso y el ejercicio. Cumplidos estos –para bien, claro–, se considera que una persona está sana (porque sano se está, no se es, maravillas del español). Dicho esto, un estudio reciente ha demostrado que quizá el atributo más determinante es tener una buena capacidad cardiorrespiratoria, lo que toda la vida se ha entendido como tener fondo, y no tanto lucir delgado. Omite el texto, sin embargo, que normalmente la gente con esta capacidad no suele estar por encima de su peso recomendado (por los médicos, no por Instagram). Al final, es todo tan sencillo y tan difícil al mismo tiempo como cuidarse, moverse, tocar un poco de césped de vez en cuando y, sobre todo, mirar poco las redes sociales.