Los supermercados Casino y el proteccionismo
El saneamiento de la cadena testará el rechazo del Gobierno francés a los inversores foráneos
El minorista francés Casino necesita reducir su deuda en unos 6.400 millones, y estudia dos ofertas, la de Daniel Kretinsky, apodado la esfinge checa, y la del magnate galo de las telecos Xavier Niel. La empresa detalló ambas el martes, lo que hizo caer la acción hasta un 35% (luego han subido un 5%). El grupo, que llegó a valer más de 10.000 millones, ha perdido más del 95% en nueve años por la caída de la cuota de mercado y un sobrecargado balance.
El plan de Kretinsky le daría más opciones de ejecutar su plan de negocio (venta de activos y mejora de las tiendas). Junto al francés Mar...
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El minorista francés Casino necesita reducir su deuda en unos 6.400 millones, y estudia dos ofertas, la de Daniel Kretinsky, apodado la esfinge checa, y la del magnate galo de las telecos Xavier Niel. La empresa detalló ambas el martes, lo que hizo caer la acción hasta un 35% (luego han subido un 5%). El grupo, que llegó a valer más de 10.000 millones, ha perdido más del 95% en nueve años por la caída de la cuota de mercado y un sobrecargado balance.
El plan de Kretinsky le daría más opciones de ejecutar su plan de negocio (venta de activos y mejora de las tiendas). Junto al francés Marc Ladreit de Lacharrière, ofrece 860 millones de nuevos fondos propios para invertir y reducir la deuda, pero también quiere que los dueños de deuda no garantizada y los accionistas actuales aporten 490 millones de dinero nuevo entre todos. El plan de Niel, respaldado por el financiero Matthieu Pigasse y el empresario Moez-Alexandre Zouari, solo aporta 450 millones de nuevos fondos propios y lo mismo en deuda preferente.
Casino había dicho que busca más de 900 millones de fondos propios en su procedimiento de reestructuración respaldado por los tribunales, que también convertirá en capital unos 3.500 millones de deuda no garantizada y 1.500 millones de deuda garantizada.
Los accionistas actuales quedarán en todo caso muy diluidos, con menos del 0,2% del capital. Pero la idea de Kretinsky dejaría Casino con 770 millones de deuda el año que viene, algo más de 1 vez el ebitda. El plan de Niel lo dejaría con unos 2.900 millones de deuda, más de 4 veces el ebitda. Puede ser la razón por la que Casino parece inclinarse por la oferta del checo. Cualquier acuerdo deberá ser aprobado por los acreedores.
El Ministerio de Economía lo sigue de cerca. La negativa de Kretinsky a comprometerse a mantener el empleo, en contraste con la promesa de Niel de no tocar los 50.000 trabajadores galos, puede ir en su contra. París también se ha mostrado hostil a los dueños extranjeros de supermercados: en 2021 bloqueó la propuesta de compra de Carrefour por la canadiense Alimentation Couche-Tard.
Pero el checo es ya una figura bien relacionada en la empresa gala, y pronto podría controlar la segunda editorial del país. Ello podría granjearle favores del Gobierno, sobre todo si logra convencer a Macron de que su plan es el más sensato.
Los autores son columnistas de Reuters Breakingviews. Las opiniones son suyas. La traducción, de Carlos Gómez Abajo, es responsabilidad de CincoDías
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