La antigua NH dispara sus ingresos un 10% hasta los 2.380 millones de euros
La compañía prevé más de 20 aperturas para 2025 y se centrará en contratos de franquicia y gestión
Minor Hotels Europe & Americas, la antigua NH, se ha visto beneficiada por los dos años de crecimiento explosivo del turismo y ha obtenido los mejores resultados de la historia en 2024. En un encuentro con medios de comunicación, el nuevo consejero delegado de la compañía, Gonzalo Aguilar, ha avanzado, a falta de que se formulen definitivamente las cuentas correspondientes al pasado ejercicio, la primera estimación de cierre de cifra de negocio, con un avance en torno al 10% con respecto a 2023, y del resultado de explotación (ebitda) recurrente, que habría crecido en una horquilla que variará entre un 15% y un 20%.
De esta manera, la cifra de negocio se habría disparado hasta los 2.380 millones, lo que sería un nuevo máximo histórico, mientras que el ebitda recurrente se habría situado en 393 millones de euros, también nuevo récord de la compañía. Aguilar destacó que la principal clave que explica el fortalecimiento de la cuenta de resultados ha sido el alza de la tarifa media, con un repunte del 5% en el último ejercicio hasta el máximo histórico de 145 euros por noche y habitación, gracias en gran medida al mayor peso del lujo y los resorts en la cartera de la compañía, con la incorporación de activos con las marcas premium de la compañía, como Anantara, Avani o NH Collection. “En 2024, sin embargo, no hemos logrado todavía alcanzar los niveles de ocupación previos a la pandemia, con una media del 69%, tres puntos por debajo del 72% de 2019″.
Con una cartera hotelera de 347 hoteles al cierre del tercer trimestre de 2024, la compañía firmó 18 hoteles en 2024 y está en negociaciones para incorporar otros 52 en los próximos ejercicios. “El objetivo es elevar nuestra cartera para 2025 con más de 20 hoteles”. En este punto, el consejero delegado enfatizó que el crecimiento de la cartera (220 activos en alquiler, 73 en propiedad y 54 en gestión) se va a centrar a través de los modelos de franquicia y de gestión, sin despreciar oportunidades selectivas en alquiler y compra. Un cambio motivado por el elevado pasivo que arrastra la compañía por el gran volumen de contratos de alquiler, que computa como deuda financiera. A 30 de septiembre de 2024, la compañía tenía una deuda financiera neta de 2.321 millones de euros, de los que 2.008 millones (un 86,5% de total) procedía de los alquileres. Descontándolos, la deuda se reduce a 313 millones de euros.
Una situación similar a la que vive Meliá, que cerró los nueve meses transcurridos entre enero y septiembre ce 2024 con una deuda neta de 2.318,9 millones de euros, de los que 1.486 millones (un 64,1%) estaban vinculados a los contratos de alquiler. Un apalancamiento que le ha obligado a impulsar distintas ventas de activos para reducirlo. La última venta se cerró a mediados de diciembre, al vender por 60 millones de euros al grupo dominicano Popular el 25% de dos hoteles de la compañía en Punta Cana (Paradisus Palma Real Golf & Spa y ZEL Punta Cana). Una situación radicalmente diferente a la de otros competidores, como Barceló, con deuda cero y una inversión de 400 millones en compras y reformas en 2024 y una previsíón similar para este ejercicio.