Globalia se adelanta a IAG y cubre con activos el 100% de una ampliación de 65 millones en Air Europa
El grupo de la familia Hidalgo deja abierta la puerta para que el holding de Iberia se sume con su 20% antes del 13 de diciembre
El primer accionista de Air Europa, la familia Hidalgo a través de Globalia, asegura haber garantizado la sostenibilidad financiera de la compañía al inyectar 65 millones de euros en activos en una ampliación de capital que ha suscrito en un 100%. Globalia controla el 80% de la aerolínea, mientras que el holding propietario de Iberia, IAG, cuenta con una participación del 20%. El refuerzo del patrimonio de Air Europa evita la causa de disolución a final de año por el desequilibrio motivado por las abultadas pérdidas en 2020 y 2021. La compañía ha actuado ante la previsión de que el Gobierno levante la moratoria contable con la que evitó centenares de quiebras entre empresas por el impacto de la crisis sanitaria y la invasión rusa de Ucrania.
La situación era de urgencia dadas las fechas en que se produce la operación y Globalia no ha esperado a que IAG tome una decisión sobre una ampliación de capital que inicialmente fue diseñada con un montante de 81 millones de euros. El grupo que lidera Luis Gallego estaba llamado a acudir con 16 millones, en proporción a su paquete accionarial, pero no ha dado señal alguna sobre su estrategia en la que es eterna rival de Iberia. Sin embargo, la empresa de Juan José Hidaldo mantiene la posibilidad de que este socio se sume a la operación de aquí al 13 de diciembre.
Desde Air Europa se ha indicado esta mañana que la aportación del socio mayoritario da estabilidad al balance y garantiza tanto el cumplimiento con los acreedores como el desarrollo del plan estratégico. Los 65 millones, señala en un comunicado, alcanzarían para completar con solvencia el cierre del presente ejercicio. Globalia ha eludido explicar qué tipo de activos han sido traspasados a Air Europa, mientras fuentes del sector apuntan a inmuebles.
La dirección de Air Europa anticipa que maneja “excelentes perspectivas de negocio” para la conclusión de este 2024. La demanda de viajes, así como la capacidad desplegada por la compañía, han seguido al alza este año pese al retraso en la llegada de aviones pedidos a Boeing, y la estimación para el 31 de diciembre pasa por alcanzar los 12 millones de viajeros (11,7 millones en 2023 tras un incremento del 14%). Ya el año pasado se produjo un cierre con récord de beneficio neto, fijado en 165 millones, desde los 470.000 euros ganados un años antes o los 28,6 millones que declaró en 2019.
A las puertas de Globalia han llamado en las últimas semanas distintos actores de la industria, y también de perfil financiero, preguntando por sus intenciones a futuro respecto a Air Europa. La empresa está en el escaparate de venta, tal y como adelantó Cinco Días, pero de momento se mantiene como independiente una vez que IAG retiró en agosto su propuesta de compra por las exigencias de la Comisión Europea en materia de concesiones operativas a la competencia. Air France ha tomado ventaja en la carrera por el mando de la segunda aerolínea española de red y ya negocia la posible adquisición de una participación minoritaria o, como mínimo, nuevos acuerdos comerciales. Los contactos son incipientes y podrían acelerarse un vez cerrada esta recapitalización.
Air Europa asegura avanzar en su proceso de desapalancamiento y reducción de costes financieros. “Un año más, Air Europa es capaz de confirmar el acierto de su estrategia con un rendimiento consistente que se verá avalado por las cifras de negocio. Con esta ampliación de capital estamos en disposición de mirar con más seguridad el horizonte de un mercado inestable en el que estamos convencidos de que seguirá habiendo margen de crecimiento”, ha declarado el presidente de Globalia, Juan José Hidalgo a través de un comunicado. El fundador de la aerolínea añade que “el esfuerzo de toda la compañía ha sido clave para situarnos en la posición que ocupamos en estos momentos. Continuaremos trabajando con la misma dedicación para seguir cumpliendo con la ruta que nos hemos fijado”.
La crisis sanitaria derivó el pérdidas millonarias, lo que hizo que la empresa tuviera que endeudarse con un crédito de 141 millones avalado por el ICO, ya devuelto, y 475 millones de euros prestados por la SEPI (235 millones en crédito ordinario y 240 millones de préstamo participativo) que deben reintegrarse en noviembre de 2026. Fuentes cercanas a la empresa consideran que el arranque de 2025 es el mejor momento para lanzar una operación corporativa, a la espera de unos buenos resultados de 2024 y sin la presión aún del citado vencimiento de deuda, circunstancias que elevarían su valor desde los 500 millones más la deuda en que tasó IAG a la aerolínea.