Ence ultima el primer dividendo de 2024 ante la recuperación del precio de la celulosa
La tonelada vuelve a superar los 1.300 dólares, en línea con los máximos históricos de 2022. Prevé aprobarlo en el segundo trimestre y repartirlo en el tercero.
Ence quiere aprovechar la apreciación de precio de la celulosa para volver a retribuir a sus accionistas. Tras repartir tres dividendos en 2022 y otros dos en 2023 (siempre con cargo a los resultados del ejercicio anterior), la papelera todavía no ha premiado a sus accionistas este año por las pérdidas de 25 millones en las que incurrió el pasado ejercicio como consecuencia del desplome de la cotización internacional de la celulosa, ...
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Ence quiere aprovechar la apreciación de precio de la celulosa para volver a retribuir a sus accionistas. Tras repartir tres dividendos en 2022 y otros dos en 2023 (siempre con cargo a los resultados del ejercicio anterior), la papelera todavía no ha premiado a sus accionistas este año por las pérdidas de 25 millones en las que incurrió el pasado ejercicio como consecuencia del desplome de la cotización internacional de la celulosa, con un ajuste anual del 24%.
El precio de la tonelada de celulosa tocó techo en agosto de 2022 al llegar a 1.380 dólares y en ese nivel se mantuvo hasta febrero de 2023, cuando inició una caída libre hasta los 800 euros que alcanzó en agosto del mismo año. A partir de esa fecha inició una tímida escalada hasta superar los 1.000 euros al cierre del ejercicio para luego volver a dispararse en un acelerón sin precedentes en el primer cuatrimestre de 2024 hasta los 1.308 euros. Ya está cerca de los máximos históricos de 2022.
Las previsiones que manejan los analistas son muy optimistas y apuntan a que el próximo mes se podría superar ya los 1.440 dólares por tonelada, lo que supondría otro récord absoluto. Afianzada la recuperación de la cotización, la papelera se dispone a premiar a sus accionistas. “En este contexto de fuerte generación de caja, se cumplen todos los requisitos para que se produzca una distribución de dividendos en el segundo semestre del año. De este modo, en la actual situación de altos precios de la celulosa, previsiblemente se propondrá el reparto de un primer dividendo en el segundo trimestre de 2024 (para su distribución en el tercer trimestre)”, recalca un informe interno de la compañía al que ha tenido acceso CincoDías.
A la recuperación del precio de la celulosa ha contribuido el repunte de la demanda procedente de China y Europa. Los datos que maneja Ence avalan que la demanda global de celulosa creció un 6,5% anual (0,7 millones de toneladas más) en los dos primeros meses del año, impulsada por el crecimiento de Asia, con un 9,4% más (0,4 millones de toneladas), junto a una menor oferta procedente de EE UU, uno de los mayores productores del mundo.
La combinación de una menor oferta con una mayor demanda va a tener efectos balsámicos en la cuenta de resultados de las empresas del sector. Ence ya lo ha notado, con un regreso a beneficio entre enero y marzo, en el que se anotó un saldo positivo de 9,5 millones de euros, y una revalorización del valor de sus acciones de un 12,5%. El resto de gigantes de la industria papelera europea, como UPM, Stora Enso o Metsa Board, también han notado este impacto en sus cuentas de resultados y en su cotización en bolsa. En el caso de Ence, los títulos cotizan en torno a los 3,40 euros, recuperando los niveles alcanzados hace un año.
¿Quién se verá beneficiado por el nuevo dividendo?
El 54,7% de las acciones de Ence están disponibles para ser negociadas en los mercados financieros, mientras que el restante 45,3% se reparte entre cinco grandes accionistas. Todos ellos se verán beneficiados por la distribución de un nuevo dividendo.
El accionista particular más importante es el empresario vasco Juan Luis Arregui, fundador de Gamesa y de Guascor, que posee en la actualidad el 29,44% de las acciones a través de la sociedad Retos Operativos XXI y que fue presidente de Ence desde 2006 hasta 2019. Solo en 2022 se llevó 41,2 millones en dividendos de los 140 millones con los que la compañía retribuyó a sus accionistas. A bastante distancia aparece Victor Urrutia, que atesora el 7,29% de las acciones a través de la sociedad Asúa Inversiones. Es la tercera mayor fortuna del País Vasco, según Forbes, con un patrimonio valorado en 650 millones de euros, y es también el máximo accionista de la Compañía Vinícola del Norte de España (CUNE).
El tercero en la lista de grandes accionistas de Ence es José Ignacio Comenge, que posee el 6,38% de las acciones mediante la sociedad Mendibea 2002. Este empresario también participa en el capital de otras compañías como Coca-Cola European Partners, Ebro Foods o Prim. El restante 2,19% se lo reparten entre miembros del Consejo de Administración y la autocartera la compañía.
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