Guaidó convoca a la “protesta sostenida” con Bolivia como ejemplo
La oposición pide a los militares que den la espalda al líder chavista, Nicolás Maduro
El jefe del Parlamento de Venezuela, Juan Guaidó, a quien casi 60 países reconocen como presidente encargado, pidió este sábado a la oposición que se agrupa bajo su figura mantenerse en "protesta sostenida" hasta forzar un cambio de Gobierno, y con los recientes sucesos de Bolivia como ejemplo.
"Tenemos una agenda de conflicto permanente, sostenida, en la calle", dijo Guaidó ante miles de simpatizantes congregados en el este de Caracas.
"La lucha es hasta que cese la usurpación, hasta lograr la transición, hasta que haya elecciones libres", añadió al señalar que los opositores habrán "perdido" si no regresan a las calles tras esta jornada.
En ese sentido, adelantó que la próxima semana liderará las protestas de varios gremios de empleados públicos, como los de los enfermeros y maestros, y que acompañará a los estudiantes a una manifestación hasta Fuerte Tiuna, el cuartel militar más grande de Caracas.
También se registraron manifestaciones en 20 estados del país atendiendo a la misma convocatoria de Guaidó.
Llamamiento a militares
El jefe del Legislativo, el único poder que controlan los detractores de Maduro, afirmó que la mayoría de los venezolanos desean un cambio de Gobierno, e hizo un nuevo llamamiento a las fuerzas policiales y militares para que den la espalda al líder chavista, Nicolás Maduro, en el poder desde 2013.
"Tenemos que insistir hasta que el poder de las armas no esté del lado del usurpador, sino del lado de la Constitución (...), es el factor que hoy nos falta, es el factor que hoy debe tomar una decisión", dijo.
Desde que proclamó un Gobierno interino a finales de enero pasado, Guaidó ha hecho varias llamadas a las Fuerzas Armadas para que retiren su respaldo a Maduro.
El Parlamento sancionó hace meses dos leyes que garantizan el perdón a los oficiales que ayuden a "restituir el Estado de derecho" en el país, que el Legislativo considera roto desde que Maduro asumió un cuestionado nuevo mandato a principios de año.
Pero en público, los jefes policiales y militares declaran su lealtad al llamado "presidente obrero", además de declararse "antiimperialistas y profundamente chavistas".
Concentración
La manifestación de la oposición concluyó a las puertas de la Embajada de Bolivia en Caracas, donde manifestaron su respaldo a la presidenta interina de ese país, Jeanine Áñez.
"Estamos aquí no como un simbolismo, sino como un hecho político, social, democrático, porque nuestra hermana Bolivia, la hija predilecta de El Libertador, logró su libertad", dijo Guaidó en un corto discurso.
Luego, el dirigente opositor dijo a periodistas que antes de llegar a la manifestación a la sede de la embajada sostuvo una conversación telefónica con Áñez para informarle de la actividad, que también calificó como de "respaldo" al proceso de transición que atraviesa Bolivia.
Guaidó añadió que Áñez se mostró "muy contenta" al conocer la manifestación ante la embajada, que era custodiada por funcionarios de la Policía Nacional Bolivariana (PNB) y no fue recibida por diplomáticos bolivianos.
También dijo que el cambio de Gobierno en el país andino ocurrió gracias a "la unión de todos los factores (y) con la movilización constante" del pueblo durante 18 días de protestas continuas, después de que se demostrara el "fraude electoral" de Morales.
Los sucesos en Bolivia sirvieron de aliciente a inicios de semana a los opositores para atreverse a retomar las protestas en la calle, un mecanismo que habían abandonado cuando los dirigentes iniciaron negociaciones con Maduro con el auspicio del Gobierno de Noruega, aunque se rompieron sin acuerdos.
Contramarcha chavista
Como respuesta automática a la protesta opositora, el chavismo movilizó este sábado a miles de simpatizantes en Caracas, al tiempo que usó el acto para expresar su repudio a lo que considera un "golpe de Estado" contra Evo Morales.
Convocados desde el domingo por el gobernante partido PSUV, los chavistas caminaron desde cuatro puntos de la capital venezolana hasta el centro de la ciudad, en la que varios dirigentes de la llamada revolución bolivariana ofrecieron declaraciones.
Nicolás Maduro no acudió a la manifestación pero declaró vía telefónica ante la multitud que la convocatoria había sido una "victoria de paz".
Maduro cifró en un millón los asistentes a la movilización chavista, que fue ampliamente difundida en los canales del Estado y contó con la participación de cientos de personas que se trasladaron desde otras regiones.