Telefónica aligera estructuras y acelera la eliminación de filiales
La supresión de sociedades afecta al área digital, I+D, holdings, audiovisual y España La teleco trabaja en la reducción de costes por operaciones
Telefónica sigue con sus políticas de ajustes internos. Así, la teleco ha acelerado en las últimas semanas la eliminación de sociedades filiales. Una estrategia que se ha extendido a distintas áreas y negocios, tanto de la propia corporación como de otras divisiones.
Estos movimientos corporativos se encuadran en la estrategia aplicada por la compañía que preside José María Álvarez-Pallete para simplificar sus estructuras, facilitar la gestión y reducir costes operativos, siempre con el objetivo final de reducir deuda por vía orgánica. Y es que, la eliminación de filiales supone la supresión de consejos de administración y otros órganos de gestión, además de otros costes asociados.
El último movimiento fue comunicado el pasado lunes. Telefónica I+D va a absorber EyeOS, la compañía creada por el emprendedor Pau García Milá que fue adquirida por la teleco en 2014 y que trabajaba en el desarrollo de un escritorio de ordenador en la nube. Telefónica, no obstante, había confirmado en diciembre el fin de la comercialización de los servicios de EyeOS.
Además, Telefónica Latinoamérica Holding, compañía que engloba numerosas participaciones de Telefónica en Latinoamérica y heredera en gran medida de la antigua Telefónica Internacional (TISA), comunicó la pasada semana que absorberá Telefónica Datacorp y Ecuador Cellular Holdings. En este sentido, la operadora había trasladado a principios de año la sede social de Ámsterdam a Madrid de esta última sociedad, que es la matriz de Otecel, la filial ecuatoriana de Telefónica.
De igual forma, la teleco tiene en marcha una reestructuración societaria en torno a la antigua Telefónica Digital. Así, la operadora acaba de aprobar la absorción de Telefónica Digital Holdings, que fue constituida a principios de 2012 para ser la matriz de todo el nuevo negocio digital de la compañía, por parte de Telefónica Digital España, encargada de esta actividad en el mercado español.
Asimismo, la operadora aprobó hace pocos días la fusión de sus dos grandes productoras de contenidos, uno de los negocios estratégicos de la teleco. De esta forma, Telefónica Audiovisual Digital, matriz de Movistar+, va absorber Telefónica Studios. Además, dentro de este ámbito, la teleco va a traspasar la antigua DTS desde Telefónica de Contenidos a Telefónica de España.
La estrategia de eliminación de filiales también se ha extendido al mercado español. Entre otros movimientos, la operadora aprobó en junio la absorción de Iberbanda, dedicada a la gestión de la histórica red de tecnología inalámbrica wimax, por parte de Telefónica de España. Un movimiento que viene acompañado con el apagado de esta red y su sustitución por otras tecnologías móviles. La teleco, igualmente, procedió hace pocas semanas a la absorción de la histórica división Telefónica Telecomunicaciones Públicas (TTP), encargada de la gestión de las cabinas públicas, por parte de la citada Telefónica de España.
En Brasil, la compañía ha reestructurado sus negocios digitales, y ha integrado Telefónica Data con la división local de Terra (hasta ahora controlada por SP Telecomunicações Participações, sociedad de la propia Telefónica, tenedora de las acciones de la propia Telefónica Brasil).
Eliminación de consejos
Telefónica ha simplificado la estructura de mando en diversas divisiones en el mercado español en los últimos meses. De esta forma, la compañía ha procedido a la progresiva eliminación de los consejos de administración y su sustitución por administradores únicos o solidarios.
Entre las filiales afectadas por estos movimientos internos figuran sociedades de relevancia como la propia Telefónica de España (histórica sociedad matriz de la compañía), Telefónica Móviles España, la división de tiendas propias Telyco y la filial de centros de datos Acens.
Con estas medidas, Telefónica ha centrado sus esfuerzos en los últimos tiempos en la reducción de la deuda de forma orgánica. Con ese objetivo, la empresa ha acelerado en sus estrategias de control de costes. Así, por ejemplo, Telefónica redujo los gastos por operaciones en el mercado español en el primer trimestre del año un 3,3% hasta 2.003 millones de euros.