Iberdrola insiste en que existe un "conflicto de competencia" con ACS
El juicio celebrado en Bilbao por el contencioso que mantienen Iberdrola y su primer accionista, ACS, se ha centrado en la declaración de los peritos de ambas partes, que en el caso de la eléctrica han insistido en que existe un conflicto de competencia estructural y permanente entre las dos compañías, aspecto que negaron los peritos del grupo que preside Florentino Pérez.
El juicio proseguirá mañana miércoles con la continuación de las declaraciones de los peritos y las conclusiones de los letrados de ambas empresas.
La vista oral de este martes se extendió durante unas cinco horas (entre las 10:00 y las 15:00 horas) y es fruto de la demanda de impugnación que ACS presentó en marzo de 2010 contra los acuerdos de la última junta de accionistas de Iberdrola, que impidió al grupo constructor entrar en su consejo pese a ser su primer accionista.
En esta primera sesión del juicio declararon los peritos que han elaborado los informes presentados por ambas partes, de las firmas Nera Economic Consulting y PricewaterhouseCoopers para Iberdrola, y los periciales de Forest y de Gonzalo Solana y Javier Huertas para ACS.
Los peritos de Iberdrola aseguraron que ambas empresas son competidoras en determinadas áreas, como las energías renovables o la ingeniería industrial, y afirmaron que se da un conflicto "estructural y permanente" que se traduce en un "daño a los accionistas" de la eléctrica por la "minusvaloración" de la capacidad de Iberdrola para generar valor para sus accionistas.
Por su parte, los peritos que han elaborado los informes para ACS reconocieron que puede existir concurrencia, pero no competencia, y aseguraron que el grupo constructor no puede ser un competidor para Iberdrola porque no tiene un mix de energía para competir y por la "clase de generación" en la que opera.