Corbacho prevé que más de 300.000 personas se beneficien de la ayuda a parados
La ayuda a los parados que hayan agotado la protección y no dispongan de ingresos beneficiará a más de 300.000 personas y entrará en vigor a mediados de este mes, con efectos retroactivos desde el 1 de agosto, según anunció el ministro de Trabajo e Inmigración, Celestino Corbacho.
Esta medida será aprobada mañana en el Consejo de Ministros extraordinario que celebran los miembros del Gobierno, cumpliendo con el anuncio que realizó el jefe del Ejecutivo, José Luis Rodríguez Zapatero, poco después la ruptura del proceso de diálogo social.
Corbacho, en una entrevista con Europa Press, subrayó que los desempleados que hayan agotado prestaciones y subsidios y no tengan rentas podrán percibir esta ayuda, de 420 euros mensuales, durante un periodo de seis meses, evitando así que "queden desamparados desde el punto de vista de la protección social".
El perceptor de esta renta, explicó el ministro, asumirá el compromiso con el servicio público de empleo de su comunidad autónoma de participar en un itinerario de formación y empleo.
Corbacho destacó que el objetivo de esta iniciativa, cuya duración no acaba de convencer a los sindicatos, "no es el de hacer un subsidio, sino el de dar una renta de protección para que las personas que la reciban tengan acceso a una formación y puedan volver al empleo lo antes posible".
Aunque cada perceptor sólo podrá recibir la ayuda durante un máximo de medio año, el Gobierno mantendrá en vigor este programa de ayudas durante más tiempo. De hecho, su permanencia estará condicionada a la evolución del paro y de las condiciones económicas.
"Parece razonable mantenerlo si la crisis no se acaba en seis meses o si empieza a ser superada pero permanecen sus efectos sobre el empleo, que suele ir un poco más lento. Por lo tanto, seis meses para la personas, que no para el programa", precisó el ministro.
De esta forma, la norma que se aprobará mañana habilita al Gobierno para ir prorrogando este programa de ayudas en la medida en que los índices de coyuntura económica sigan siendo negativos. El Real Decreto que regula esta ayuda entrará en vigor "a partir del 14 de agosto", aunque Corbacho puntualizó que tendrá efectos retroactivos desde el primero de mes.
El coste de esta ayuda superará los 400 millones de euros y, según Corbacho, se financiará directamente con cargo al Servicio Público de Empleo (antiguo Inem) y a los Presupuestos Generales del Estado (PGE).
El Gobierno aún tiene "capacidad de reacción
Preguntado por si al Gobierno le queda margen de maniobra para tomar nuevas medidas ante la perspectiva de que el paro vuelva a la senda alcista en otoño, Corbacho reconoció que los márgenes, "como es natural y lógico", cada vez van siendo menores.
No obstante, subrayó que el Gobierno aún tiene capacidad de reacción, aunque éste sea menor a la que por ejemplo tenía hace un año, cuando el Estado disfrutaba de superávit y su deuda representaba la mitad de la media europea.
Es verdad que hace un año había una situación financiera mucho mejor y, por tanto, más margen de maniobra (...) En las nuevas medidas, deberemos partir de la base de que se adoptan, no ya sobre una situación de superávit sino de déficit, y no ya sobre una situación del 30% de deuda, sino superior", explicitó.
Asimismo, Corbacho recordó que, al igual que se ha hecho en otros países, muchas medidas que se han ido adoptando son coyunturales, por lo que una vez finalizadas, lo invertido en ellas podrá dedicarse a dar una respuesta nueva a otra coyuntura o circunstancia del momento. Como ejemplo, el ministro puso las ayudas al automóvil.
"Llegará un día que cuando el sector del automóvil se recupere y llegue a una cierta normalidad, no será razonable que de los impuestos de los ciudadanos demos una parte a otros ciudadanos para que se compren un coche", algo que, según dijo el ministro, todo el mundo entiende que se haga en este momento de crisis para impulsar esta industria.