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Informe

Las cajas desvinculan la pérdida de empleo neto de la deslocalización de las empresas

La deslocalización de empresas, en especial en la industria, ocurrida en España en los últimos años no ha supuesto una pérdida de empleo neto, según un estudio publicado por la Fundación de las Cajas de Ahorro (Funcas) en los Papeles de la Economía Española que rompe así con el tópico comúnmente aceptado.

El informe acepta que en el periodo entre los años 2000 y 2007, las deslocalizaciones afectaron al empleo de 85.663 personas, en un total de 467 casos de empresas que deslocalizaron toda o parte de su producción fuera del territorio español.

Sin embargo, el estudio destaca que "la destrucción de empleo originada por este proceso se ha visto compensada por la expansión de las plantillas de trabajadores de otras empresas, normalmente en el seno de las mismas actividades".

El capital extranjero copa las deslocalizaciones

Del total de deslocalizaciones, la mayoría se produjo en empresas de capital extranjero, con 290 casos que afectaron a 67.368 empleos, lo que supone un 62,1% de los casos y un 78,6% de los puestos de trabajo afectados.

Las empresas de capital español deslocalizaron menos su actividad total o parcialmente su producción, dándose en el mismo período de estudio un total de 177 casos, lo que supuso una reducción de empleo de 18.295 personas.

El estudio afirma que la expansión del empleo en otras empresas, normalmente del mismo sector que la industria de capital extranjero deslocalizada, compensó y quitó trascendencia al asunto, y hasta en el sector de bienes de equipo para el transporte se produjo el efecto contrario, una empresa que dejó su país de origen y localizó una parte de su actividad en España.

En el caso de empresas de capital nacional, la compensación en el empleo se produjo con la sustitución de empleo no cualificado por mano de obra cualificada, siguiendo las necesidades de especialización que conlleva el proceso de deslocalización de la empresa.

Aun así, los sectores del textil, la confección, el cuero y el calzado sí que han vivido una reducción de empleo de las empresas en territorio español.

Estos sectores son los que más han sufrido el fenómeno de la deslocalización, ya que es el ámbito en el que más casos se han producido (113) y más empleos se han perdido (10.972) entre todas las actividades tradicionales de la industria, según señala el informe de Funcas.

No obstante, son las actividades intermedias las que afectaron a más empleo, con la pérdida de 38.507 empleos en 160 casos de deslocalización, tanto de empresas de capital extranjero como nacional.

En los últimos dos años el proceso de deslocalización de empresas extranjeras se ha estabilizado en todos los sectores a excepción de las industrias de actividad química y de fabricación de automóviles, los dos ramos de actividad que continúan subcontratando externamente su producción fuera de territorio español.

Diferente es el caso de las empresas de capital español, ya que el estudio asegura que se encuentran en el comienzo de un proceso que debe afirmar su competitividad en el plano internacional, una tendencia que empezó con fuerza a partir de 2003 y que continuará en el futuro.

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