Un terreno vedado para las mujeres
Ni se sienten parte de las cuotas ni distintas a esos hombres con los que en su día compitieron por hacerse con el mando de la Cámara de Comercio que hoy representan. Reconocen, eso sí, que tienen una forma de trabajar distinta, una empatía especial hacia los problemas de sus colegas empresarios.
Son las mujeres de las cámaras, un reducido club al que pertenecen Margarita López Armendáriz, Silvia Falip, María Dolores Jiménez y Magda Pons-Quintana, únicas representantes del sexo femenino que presiden alguna de las 87 Cámaras.
La cordobesa María Dolores Jiménez, de 46 años, está y con dos hijos mayores, y reconoce que a los chicos 'les crió la abuela y la tata'. Se educó profesionalmente en un mundo de hombres y en él sigue, capitaneando la sociedad que montó su padre hace ya treinta años y que hoy se ha convertido en una de las empresas de obra pública más pujantes de Andalucía: Jícar.
'Nunca he diferenciado entre mi vida privada y mi vida profesional. En realidad, mi trabajo no es estrictamente un trabajo. Todos los pasos que he dado en el mundo de la empresa los he dado porque he querido, porque me encanta tomar decisiones', asegura.
María Dolores Jiménez ha sido, entre otras cosas, miembro del Comité Ejecutivo de la Cámara de Comercio de Córdoba, miembro de la Comisión de Infraestructuras del Consejo Superior de Cámaras de Comercio y miembro de la junta directiva de Asociación de Empresarios de la Construcción de Córdoba. 'He desarrollado mi vida profesional rodeada de hombres. Nunca me he sentido ni rechazada ni tratada con deferencia. Siempre he sido una más'.
Cámara centenaria
æpermil;ste será el tercer mandato de Silvia Falip, la recién elegida presidenta de la Cámara de Tárrega, la más pequeña de Cataluña. La mayoría de sus asociados son pymes, pero también hay sociedades de la dimensión internacional de Borges o Roca. Falip, de 46 años, conoce bien el mundo de los hombres, no sólo porque dirige la Cámara de Comercio de Tárrega desde el año 1998, sino porque es dueña de una pequeña empresa familiar del sector de la metalurgia. Una compañía que su padre fundó en el año 59.
Es una firme defensora de esa visión femenina de los problemas. 'Sabemos escuchar, meternos en la piel de los colegas. Tal vez no podremos solucionar los asuntos que tenemos entre manos, pero nos comprometemos hasta el fondo con ellos', señala. La generación de suelo industrial en su territorio y la deducción fiscal de la cuota cameral son dos de los temas que Silvia Falip tiene como señalados como prioritarios en su agenda. Margarita López Armendáriz es la más veterana de las tres. Nieta e hija de empresarios, López Armendáriz, que ya es abuela, lleva 'toda una vida al frente de la Cámara de Melilla', una entidad que estaba algo apagada cuando ella llegó y a la que ha dado un impulso decisivo en los últimos años. López Armendáriz no ha parado en su afán por mejorar los intercambios comerciales de sus empresas con el norte de África y el sudoeste asiático, 'aunque cuesta', reconoce.
También está acostumbrada a moverse en un mundo masculino, pues es agente de transporte mercancías. Lo tiene claro: 'Si no hay más mujeres es por culpa nuestra. Hay que pisar fuerte, tener fortaleza y convencer al marido de que el servicio que prestas a la sociedad merece la pena. A mi lo que más me gusta en el mundo es crear empleo y riqueza'. La Cámara de Melilla cumplirá en octubre 100 años.
La última en llegar ha sido Magda Pons-Quintana. Lleva más de 20 años gestionando la empresa que fundó su abuelo en la isla de Menorca y que toma el nombre del apellido familiar. Casada y con dos hijos, esta empresaria del calzado conoce perfectamente los mercados internacionales, pues fabrica 1.200 pares de zapatos al día y exporta el 60% de su producción.
Su nombramiento, que cuenta con el respaldo unánime de la clase empresarial de la isla, ha causado expectación y todos esperan que sirva para que las empresas menorquinas alcancen el renombre que merecen.
Las presidentas quieren participar en la Ejecutiva
Hoy se constituye el Pleno del Consejo Superior de Cámaras de Comercio, formado por todos los presidentes y presidentas de las cámaras regionales.Serán ellos los que, a su vez, elijan a Javier Gómez Navarro presidente del Consejo y los que decidan quiénes les representarán en la Ejecutiva. æpermil;sta se nutre además con ocho notables. En la última Ejecutiva Ana Patricia Botín formó parte de este comité de notables, y para el próximo mandato las intenciones de Gómez Navarro son mantener, al menos, esta representación femenina.