El imparable encarecimiento del 'oro líquido'
El 'aceite ha subido más que el petróleo', asegura Juan Vicente Gómez, director de Asoliva, la Asociación Española de la Industria y el Comercio Exportador del Aceite de Oliva. En diciembre de 2005 fue el producto que más se encareció, un 18,48% respecto al mes anterior. Eso en los lineales, porque en el mercado de origen el alza de precios se sitúa alrededor del 70%.
Las causas a esta escalada hay que buscarlas en la climatología. Las heladas y la sequía del pasado año recortaron la producción. Según datos provisionales de la Agencia para el Aceite de Oliva dependiente del Ministerio de Agricultura, la producción en la campaña 2004/05 superó las 989.000 toneladas frente a las 1.416.000 toneladas del año anterior.
'Los precios para los consumidores se están estabilizando, en torno a los cinco euros, entre 4,70 y 5,50 dependiendo de las calidades, cuando los precios en origen rondan los 4,20 euros', asegura el gerente de la cooperativa Hojiblanca, Antonio Luque. Los precios están más o menos controlados, apunta José Ramón Díaz, responsable del sector del olivar de Asaja.
'La escalada de precios obedece al sector productor', asegura el grupo Sos
'Con la disponibilidad actual de aceite no cubrimos el consumo', la única solución es que éste baje, 'tanto en España como fuera o que mejore la climatología', asegura Antonio Luque.
Una de las causas del aumento de los precios del aceite a finales de 2005 es que las empresas aceiteras no ha trasladado este alza de manera progresiva. El grupo Sos, propietario de enseñas como Koipe y Carbonell, asegura que 'a lo largo de todo el año tomamos la decisión de mantener los precios y ofrecer estabilidad al mercado. No obstante, en el mes de diciembre tuvimos que trasladar parte de la subida en el mercado de origen a los consumidores siendo inferior al aumento experimentado por el total del mercado'.
'La escalada de precios obedece exclusivamente a la actuación del sector productor', afirman desde el grupo Sos. Sin embargo, el director de Hojiblanca apunta que a lo largo de 2005 se tenía que haber producido una caída de la demanda para controlar los precios, un descenso que no se produjo al no repercutirse la escalada en origen.
'En cualquier mercado hay especulación', apunta el presidente del Mercado de Futuros del Aceite de Oliva (MFAO), Antonio Martín Mesa. La situación actual de aumento de precios ha beneficiado al MFAO, que cerró 2005 con un aumento del volumen negociado del 99,3% respecto a 2004. En este mercado participan cooperativas envasadoras e incluso particulares. 'El MFAO está cubriendo su papel, una función de cobertura ante la volatilidad de precios que es lo que ha pasado en el último año', asegura Martín Mesa. 'Lo malo es que dentro de esta cadena , entre el agricultor y el industrial, puede entrar un tercero que especule', asegura Juan Ramón Díaz.
Las expectativas de una posible caída de precios en origen en los próximos meses no parecen probables, según los contratos que se están realizando en este mercado de futuros. 'Los contratos que se están cerrando para 2006 lo están haciendo por encima de cuatro euros', afirma Martín Mesa, aunque la situación podría comenzar a cambiar a partir de 2006. 'Las operaciones que hemos cerrado para 2007, aunque no son muy significativas, son por debajo de cuatro euros, hay expectativas de mejora', concluye.
El alza de los precios no sólo daña al mercado interior, también a las exportaciones. 'Nos preocupa mucho esta situación, no podemos ponernos en un diferencial de precios 1/6 o 1/7 respecto a países productores alternativos', asegura el director de Asoliva. 'Si se pierden clientes, pueden ser difíciles de recuperar porque pueden optar por otros productos alternativos', concluye Juan Vicente Gómez.
Abrir un contingente arancelario
'No hay soluciones milagrosas', asegura el director de Asoliva. 'La única medida que se puede tomar a corto plazo es abrir un contingente arancelario de entre 100.000 y 200.000 toneladas para aumentar la oferta y contener los precios', apunta Juan Vicente Gómez.La Comisión Europea aseguró en noviembre a la industria que 'había que esperar' para tomar una decisión. Sin embargo, Asaja considera que la apertura de un contingente en la UE sólo supondría un encarecimiento artificial en terceros países que no frenaría el ascenso de precios.