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Pacto de Estabilidad

Los Quince no sancionarán a Francia y Alemania por su déficit

El Consejo de Economía y Finanzas de la Unión Europea (Ecofin) ha aprobado el acuerdo de conclusiones alcanzado de madrugada por los ministros de Economía y Finanzas de la eurozona sobre el déficit excesivo, por tercer año consecutivo en 2004, de los dos motores europeos. Pactado por mayoría cualificada, el texto fue rechazado por la Comisión Europea y Países Bajos, Austria, Finlandia y, sobre todo, España.

Tras intensos debates y negociaciones con cada uno de los ministros, la presidencia italiana de la UE logró arrancar anoche una declaración política que contempla solamente parte de las recomendaciones del Ejecutivo comunitario a Francia y Alemania, al establecer para ambos un déficit nominal del 3,5%. Según esta posición final, París deberá reducir un 0,77% su déficit estructural en 2004 y un 0,6% en 2005, y Berlín un 0,6 y un 0,5%, respectivamente. En la práctica, ambos seguirán teniendo hasta 2005 para reducir su déficit, pero el método para lograrlo es ahora más flexible.

Ante la retirada del procedimiento contra Francia y Alemania, el consejo de gobernadores del Banco Central Europeo (BCE) ha convocado una reunión extraordinaria, tras la cual ha deplorado la decisión del Ecofín y ha advertido de los "serios peligros" de no respetar las normas fijadas por el Pacto de Estabilidad, principalmente por los riesgos que conlleva para la credibilidad en la confianza de las finanzas de la eurozona. El BCE ha dicho tomar nota de las intenciones de Francia y Alemania de corregir el "déficit excesivo tan rápidamente como sea posible y a los más tardar en 2005" y ha instado a Berlín y París a que asuman sus responsabilidades al respecto.

Recriminaciones

De esta forma, se suspendió el voto previsto para hoy por el Consejo de Economía y Finanzas (Ecofin) sobre los procedimientos abiertos por Bruselas para que éstos situaran su déficit por debajo del 3% del PIB en 2005. El Ecofin sólo ha tenido que pronunciarse sobre estas conclusiones acordadas por el Eurogrupo, en las que incluyen sólo algunas recomendaciones del Ejecutivo comunitario.

Mientras la presidencia italiana de turno de la UE ha señalado que esta solución cumple con el espíritu y la letra del Tratado y el Pacto de Estabilidad, el comisario europeo de Asuntos Económicos y Monetarios, Pedro Solbes, ha manifestado que "no respeta ni las reglas legales ni el espíritu del Pacto". Eso sí, ha tenido que hacer hincapié hoy en que éste, "punto crucial para el funcionamiento del sistema", ni queda en suspenso ni él piensa dimitir. El ministro galo Francis Mer ha respondido a Solbes diciendo que "es libre de pensar lo que quiera, como él. Eso se llama un debate democrático".

El vicepresidente primero y ministro de Economía, Rodrigo Rato, ha advertido de que sólo la recomendación de la Comisión era "la interpretación real del Tratado". A pesar de que España se hace cargo de los esfuerzos realizados por los Gobiernos en apuros presupuestarios y asume las razones por las cuales éstos surtirán efecto no en un año, "sino en dos", la postura oficial es que los procedimientos "son imprescindibles y Europa se tiene que construir sobre la certeza de que las reglas son iguales para todos". Por eso, según Rato, no respaldó la propuesta de mínimos italiana.

El ministro de Finanzas Hans Eichel se defendía ayer asegurando que "nadie está poniendo en peligro" el Pacto, al tiempo que advirtió de que su aplicación no debería hacer peligrar los "intereses vitales" de Alemania. En ese misma línea, hoy remachaba que el Pacto "está vivo" y que las medidas que reclama Bruselas para Berlín "no hubieran sido razonables".

Francia suprimirá 33.500 empleos públicos en 2004

En un intento por recortar el gasto público, el Gobierno francés ha anunciado hoy su intención de suprimir 33.561 puestos de trabajo públicos en 2004, a pesar de haber previsto inicialmente prescindir de 4.561 funcionarios en los presupuestos recientemente aprobados, informa EP. Estas cifras, reveladas hoy por el diario Le Parisien, incluyen un cálculo de todos los trabajadores públicos a los que el Estado no renovará sus contratos. Por ejemplo, 23.000 empleos jóvenes de la Educación Nacional, creados por el Ejecutivo socialista de Lionel Jospin, y 19.000 empleos en la Administración local.

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