Empleados e impositores ganarán peso en las cajas

La Ley Financiera impondrá límites máximos y mínimos a la presencia de impositores y empleados en los órganos de gobierno de las cajas a través de una enmienda que aprobará el lunes la Comisión de Economía del Senado, según se decidió ayer en la ponencia en la que se discutieron las enmiendas del Grupo Popular.

El artículo 3º de la Ley de ârganos Rectores de las Cajas de Ahorros fija los porcentajes máximos de representación de cada grupo. Da a los impositores un 44%, y a los empleados de las cajas, un 5%, pero deja a las comunidades autónomas la posibilidad de que incluyan otros grupos de representación. El objetivo del PP con la nueva norma es dejar cerrado el peso de los grupos de interés. Así, establecerá una horquilla de entre el 5 y el 15% para los empleados y del 25% al 50% para los impositores en la asamblea y en los consejos de administración de estas entidades, en las que la presencia pública no podrá superar el 50%.

Estos preceptos tendrán carácter básico, es decir, serán de obligado cumplimiento para todas las comunidades, que tendrán que adaptar sus normativas. Posteriormente, las cajas tendrán que recomponer sus asambleas y sus consejos para adaptarse a los nuevos límites.

La ponencia incluye también la enmienda relativa a la limitación a 70 años de la edad de los consejeros y presidentes, a menos que las comunidades decidan regular al contrario. Recoge, además, la enmienda que limita los derechos de los cuotapartícipes, que no podrán estar en el sorteo para elegir representantes de los impositores en los órganos de gobierno de las cajas, para evitar que estos títulos otorguen algún tipo de derechos políticos. Estos retoques suponen avances en el ansiado consenso entre los partidos para la reforma de las cajas, aunque aún quedan pendientes algunos flecos para llegar a un pacto.