Suiza pone en peligro la futura directiva de fiscalidad del ahorro
La rotunda negativa de Suiza a eliminar el secreto bancario de su legislación hace prever un futuro nefasto a la directiva europea de fiscalidad del ahorro ya pactada entre los Quince. Las últimas negociaciones entre la Comisión Europea (CE) y el Gobierno de Berna, celebradas ayer en Bruselas, pusieron de relieve que 'la posición revisada de Suiza de agosto es igual a la de julio y la de junio', señaló el portavoz comunitario de Mercado Interior y Fiscalidad, Jonathan Todd.
Los Quince acordaron tras intensas negociaciones en el Ecofin de Feira (Portugal), en junio del 2000, un texto para la armonización de la fiscalidad sobre los ahorros que planteaba la necesidad de que países terceros como Suiza, Estados Unidos, Mónaco, San Marino, Liechtenstein y Andorra incorporaran a sus legislaciones medidas 'equivalentes'. De estos cambios, destinados a aportar claridad a los mercados financieros internacionales, dependen el voto de Luxemburgo, y en menor medida de Austria o Bélgica, antes de dar el paso definitivo en la UE a un sistema de intercambio de información generalizado. Con estos resultados, la CE se muestra pesimista. 'Si no hay acuerdo no habrá directiva europea, porque la directiva debe adaptarse por unanimidad, según se estableció en Feira', indicó el portavoz.
El Gobierno suizo había supeditado durante varios meses el comienzo de las negociaciones políticas sobre la eliminación del secreto bancario a la apertura de conversaciones sobre otras áreas, para conseguir acuerdos con la UE en cuestiones educativas, de servicios o del Convenio de Schengen. Sin embargo, una vez que ya se han aprobado los mandatos de negociación, los representantes suizos siguen siendo inflexibles. La propuesta suiza descarta la posibilidad de eliminar el secreto bancario y ofrece que sea el titular de la cuenta en el extranjero quien decida si el banco puede dar información a los Estados europeos, de lo que se derivaría el pago de impuestos sobre los intereses de los ahorros establecidos en Suiza.