Alemania reconoce que crecerá por debajo del 1,5%
La desaceleración económica que campa por los principales países de la zona euro se está cebando especialmente en Alemania, motor de la economía de la Unión Europea. Ayer, el ministro de Economía germano, Werner Müller, admitió que el crecimiento del producto interior bruto (PIB) del gigante alemán no alcanzará este año el 1,5%.
Hasta el momento, el Ejecutivo federal, en especial el ministro de Finanzas, Hans Eichel, sólo había admitido que el crecimiento estará "por debajo del 2%", informa Ciro Krauthausen. Las declaraciones de Müller suponen un nuevo jarro de agua fría para quienes habían apostado por una pronta recuperación de la economía germana. No obstante, Müller dibujó para 2002 un escenario más optimistas, con crecimientos que podrían acercarse al 3,5% en sintonía con gran parte de los analistas.
Mientras se suceden las declaraciones de los políticos europeos, el euro encuentra nuevas dificultades para mantener la senda de apreciación frente al dólar de los últimos días. Ayer, incluso, la moneda única sufrió una fuerte caída frente a la divisa estadounidense, que fue aupada por algunos indicios de recuperación de la economía estadounidense, tras la publicación del crecimiento del índice de actividad manufacturera.
Por la tarde, la moneda única se cambiaba en el mercado de divisas de Francfort a 0,8862 dólares, comparado con los 0,9001 dólares de la jornada matinal. En Londres se deprecio hasta 0,8849 dólares. El Banco Central Europeo fijó su cambio oficial en 0,8970 dólares.
La publicación de datos coyunturales positivos en Estados Unidos, que manifiestan una reactivación del sector manufacturero, en recesión en los últimos meses, favoreció la cotización del billete verde, que subió un 2,2% frente a la moneda europea, lo que supone el mayor aumento en los últimos nueve meses.
La Asociación Nacional de Administraciones de Compra informó que el índice de actividad manufacturera, uno de los sectores más representativos para analizar la recuperación de la economía en Estados Unidos, aumentó en julio del 43,6% al 47,9%, superando las expectativas de los analistas, que preveían un 43,2%.