Annan pide que se eliminen los aranceles a los países pobres
El secretario general de Naciones Unidas, Kofi Annan, pidió ayer a los países industrializados que eliminen las barreras impuestas a los productos exportados por los países más pobres del planeta, en su mayoría ubicados en Asia y África subsahariana.
La recomendación se incluye en un informe que recoge 87 diferentes medidas para paliar las necesidades de los países en vías de desarrollo. Annan lo presentó el día de la clausura de la cumbre de Davos, donde los principales actores económicos del mundo han debatido sobre la globalización, que hasta la fecha ha beneficiado más a los países ricos.
Según Gonzalo Fanjul, técnico de estudios de la ONG Intermón Oxfam, los países más pobres dejan de ganar 700.000 millones de dólares (unos 126 billones de pesetas) anuales debido a las barreras impuestas a sus exportaciones, mayores cuando se trata de productos agrícolas y textiles.
El escollo que suponen pa-ra los países de la Unión Europea los productos agrícolas quedó patente en la propuesta que lanzó el pasado mes de noviembre el comisario de Comercio de la UE, Pascal Lamy.
Dicha propuesta, denominada EBA (todo menos armas, en sus siglas en inglés) contempla la eliminación de los aranceles para los productos de los 48 países más pobres. Sin embargo, concede una moratoria de tres años para los productos más sensibles: azúcar, arroz y plátano. La iniciativa del comisario, que aún no ha sido aprobada y que cuenta con la oposición de varios miembros, fue calificada por Annan como "un modelo a seguir por el resto del mundo".
Entre las recomendaciones, la ONU contempla la conveniencia de que los países pobres puedan regular los flujos de capital a corto plazo en tiempos de crisis, aunque Annan quiso aclarar que la limitación "no puede utilizarse en sustitución de políticas económicas apropiadas". Además, se plantea la necesidad de aumentar la inversión privada para compensar la caída de la ayuda internacional. Según el informe, la media de ayuda internacional cayó al 0,24% del PIB en 1999, frente al 0,33% de 1992.