Nothing Phone (3) vs Samsung Galaxy S24 Ultra: ser diferente no siempre es mejor
Te mostramos comparadas las características más importantes de estos dos smartphones para que sepas cuál es el mejor para ti.
La llegada del Nothing Phone (3) ha hecho que algunos se planteen hacerse con él. La marca de Carl Pei, conocida por su apuesta por el diseño rompedor y la diferenciación, vuelve a la carga con un móvil que pretende plantar cara a los pesos pesados del sector. Pero, ¿está realmente preparado para competir de tú a tú con gigantes como el Samsung Galaxy S24 Ultra? Analizamos a fondo ambos modelos para descubrirlo.
Diseño: personalidad frente a sobriedad
El Nothing Phone (3) no deja indiferente a nadie. La trasera transparente sigue siendo su seña de identidad, pero esta vez la simetría minimalista de generaciones anteriores da paso a una propuesta más arriesgada: cámaras de diferentes formas y tamaños, y la novedosa pantalla Glyph Matrix en una esquina, que aporta un toque caótico y futurista. Esta matriz micro-LED permite mostrar notificaciones, alertas, minijuegos y hasta indicadores de batería sin encender la pantalla principal, buscando reducir distracciones y dar un plus de personalización.
Sin embargo, la utilidad real de la Glyph Matrix está en entredicho. Aunque añade funciones curiosas y es personalizable mediante un kit para desarrolladores, muchos usuarios la ven más como un guiño estético que como una revolución funcional. El propio Essential Space, un botón trasero para acceder a herramientas rápidas tampoco termina de convencer a todos los usuarios en el día a día.
En contraste, el Samsung Galaxy S24 Ultra apuesta por el clasicismo premium: líneas rectas, marcos de titanio, trasera de cristal y un módulo de cámaras perfectamente integrado. Su diseño es más sobrio, pero transmite robustez y elegancia, y resulta más cómodo para la mayoría de los usuarios. Aquí no hay excentricidades, sino una declaración de intenciones: este es un móvil de gama alta para todos los públicos.
Pantalla: calidad sobresaliente en ambos, pero con matices
El Nothing Phone (3) monta un panel OLED de 6,67 pulgadas, resolución 1.5K (2800 x 1260 píxeles), tasa de refresco de 120 Hz y un brillo máximo de 4.500 nits. Destaca por su nitidez y por una atenuación PWM de 2.160 Hz que cuida la vista en usos prolongados. La protección corre a cargo del Gorilla Glass 7i, y la experiencia visual es muy satisfactoria tanto en interiores como en exteriores.
Por su parte, el Galaxy S24 Ultra eleva la apuesta con una pantalla Dynamic AMOLED 2X de 6,8 pulgadas, resolución Quad HD+ (3120 x 1440), brillo máximo de 2.600 nits y tecnología LTPO para adaptar la frecuencia de refresco. Incorpora un recubrimiento antirreflejos que mejora la visibilidad en cualquier entorno y utiliza Gorilla Glass Victus Armor, aún más resistente.
En la práctica, ambos paneles ofrecen una experiencia de primer nivel, aunque la pantalla de Samsung es más grande, con mayor resolución y mejor tratamiento antirreflejos. La diferencia de brillo máximo, aunque notable en cifras, apunta a que apenas se percibirá en el uso real.
Rendimiento: el talón de Aquiles del Nothing Phone (3)
Aquí es donde el Nothing Phone (3) empieza a mostrar sus limitaciones. El procesador Snapdragon 8s Gen 4 es potente y eficiente, pero queda un peldaño por debajo del Snapdragon 8 Gen 3 que monta el Galaxy S24 Ultra. Esto se traduce en una diferencia de rendimiento palpable en tareas exigentes, juegos o edición de vídeo. Además, Samsung ofrece hasta siete años de actualizaciones de sistema, frente a los cinco años prometidos por Nothing.
En cuanto a memoria, ambos parten de 12 GB de RAM y 256 de almacenamiento, aunque existen versiones superiores en ambos casos. Ninguno permite ampliar la memoria mediante microSD, una tendencia ya habitual en la gama alta.
Cámaras: megapíxeles no lo son todo
El Nothing Phone (3) presume de una triple cámara trasera de 50 MP cada una (principal, periscopio con zoom óptico 3x y ultra gran angular), además de una cámara frontal de 50 MP capaz de grabar en 4K a 60 fps. La marca ha mejorado el hardware respecto a generaciones anteriores y los resultados en condiciones de buena luz apuntan a ser satisfactorios. Sin embargo, el procesado de imagen y el rendimiento en escenas nocturnas o con mucho contraste siguen siendo mejorables, y la experiencia global está un paso por detrás de los mejores del sector.
El Galaxy S24 Ultra, en cambio, juega en otra liga: sensor principal de 200 MP, teleobjetivo periscópico de 50 MP con zoom óptico 5x, teleobjetivo de 10 MP con zoom 3x y ultra gran angular de 12 MP. La versatilidad es enorme, la calidad de imagen sobresaliente en cualquier situación y la grabación de vídeo llega hasta 8K. Además, el software de Samsung y la inteligencia artificial elevan la experiencia fotográfica a otro nivel, especialmente en retrato, zoom y fotografía nocturna.
Batería y carga: autonomía para todo el día
El Nothing Phone (3) monta una batería de 5.150 mAh, con carga rápida de 65W, carga inalámbrica de 15W y carga inversa. La autonomía es uno de sus puntos fuertes, permitiendo llegar al final del día sin apuros incluso con uso intensivo. La carga rápida es notablemente superior a la de Samsung, lo que supone una ventaja para quienes buscan recargar en poco tiempo.
El Galaxy S24 Ultra equipa una batería de 5.000 mAh, con carga rápida de 45W e inalámbrica de 15W. Aunque la cifra de carga rápida es menor, la eficiencia energética del procesador y la pantalla LTPO permiten una autonomía excelente. Además, el control térmico y la gestión de energía están más pulidos, lo que se traduce en una experiencia más estable a largo plazo.
Software y experiencia de usuario
Nothing OS 3.5, basado en Android 15, mantiene la filosofía de ofrecer una experiencia limpia, fluida y sin bloatware. Es una de las capas más ligeras y agradables del panorama Android, con detalles visuales propios y una integración muy cuidada de las funciones Glyph Matrix. Sin embargo, la comunidad aún espera mejoras en el apartado fotográfico y en la utilidad de algunas funciones exclusivas.
Samsung, por su parte, apuesta por One UI ya con Android 15 por debajo con sus actualizaciones, una capa madura, repleta de opciones de personalización y con integración total de su ecosistema (S Pen, Samsung DeX, Galaxy AI, etc.). La promesa de siete años de actualizaciones y parches de seguridad es un valor añadido para quienes buscan longevidad y soporte.
Conclusión: ¿arriesgar o apostar sobre seguro?
El Nothing Phone (3) es, sin duda, uno de los móviles más originales y llamativos del año. Su diseño transparente, la Glyph Matrix y la experiencia de software minimalista lo convierten en una opción única para quienes buscan diferenciarse y apuestan por marcas independientes. Es un móvil bien construido, con buena autonomía y una interfaz que engancha a los fans de Android puro.
Sin embargo, si lo que buscas es el mejor rendimiento, la cámara más completa, el ecosistema más completo y la mayor longevidad, el Samsung Galaxy S24 Ultra sigue siendo la referencia a batir. La diferencia en potencia, fotografía y soporte a largo plazo es clara, y la experiencia global es más redonda y pulida.