En los mercados privados, la gobernanza importa
En el nuevo entorno económico, las preguntas sobre el ordenamiento han pasado a primer plano
El meteórico crecimiento de los mercados privados desde la última gran crisis financiera ha impactado en los mercados financieros y la economía real, y puede conllevar riesgos potenciales para la protección del inversor y la estabilidad financiera. En respuesta a este crecimiento, los reguladores de todo el mundo han centrado su atención en los mercados privados con un interés, incluso una urgencia, creciente. Los mercados privados se han vuelto cada vez más importantes debido a la gran expansión que han experimentado. Esto los hace más relevantes para la economía, ya que involucran muchos emp...
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El meteórico crecimiento de los mercados privados desde la última gran crisis financiera ha impactado en los mercados financieros y la economía real, y puede conllevar riesgos potenciales para la protección del inversor y la estabilidad financiera. En respuesta a este crecimiento, los reguladores de todo el mundo han centrado su atención en los mercados privados con un interés, incluso una urgencia, creciente. Los mercados privados se han vuelto cada vez más importantes debido a la gran expansión que han experimentado. Esto los hace más relevantes para la economía, ya que involucran muchos empleos en empresas que, por ejemplo, son propiedad parcial o totalmente de capital privado o financiadas por crédito privado. Así, se han convertido en una parte mucho mayor de la economía, y con el fin de la era del dinero barato, surge la pregunta: ¿existen riesgos potenciales para la estabilidad financiera como resultado?
Los mercados privados están muy presentes en las noticias. En Estados Unidos, que tiene una participación dominante en inversiones de mercado privado, los tribunales acaban de anular una nueva y amplia regulación, a la vez que controvertida, para asesores de fondos privados que fue adoptada por el regulador de ese país. Pero el asunto está lejos de cerrarse. Más bien, esperamos un continuo debate sobre cuál es la regulación y gobernanza óptima de los mercados privados, no solo en Estados Unidos sino también en mercados de todo el mundo. De hecho, la ausencia de regulaciones estrictas hace que las mejores prácticas de la industria y la autorregulación, incluidas las relaciones entre inversores o socios limitados y gestores o socios generales, sean aún más importantes.
Sin embargo, y a pesar del aumento del escrutinio, sigue existiendo una escasez de información pública sobre cómo funcionan los mercados privados, lo que puede ayudar a explicar la gran divergencia de opiniones existentes sobre ellos. Los defensores de los mercados privados aplauden su crecimiento y eficiencia, elogiándolos como ejemplos de ordenamiento privado exitoso donde los mercados operan de manera óptima sin una interferencia externa sustancial. Los críticos no están de acuerdo, sostienen que los mercados privados requieren intervención reguladora para abordar deficiencias que los actores privados no han podido resolver por sí mismos. Estas deficiencias están en gran medida relacionadas con la estructura de gobernanza de los mercados privados y cómo gestionan los posibles conflictos de interés. Así que es comprensible, aunque quizás irónico, que tengamos opiniones polarizadas. Por un lado, tenemos un interés regulador creciente en Estados Unidos, en el Reino Unido, en la UE, en China, de otro lado hay una supervisión más estricta de lo que está ocurriendo y, sin embargo, no disponemos de mucha información sobre el mercado.
Por otra parte, el aumento de la inflación y los tipos de interés han sacudido a los mercados privados hacia una nueva era. Las cuestiones de gobernanza y las preguntas sobre el ordenamiento privado han pasado a primer plano en este nuevo entorno. Los problemas giran en torno a las relaciones entre los socios limitados, que invierten en mercados privados, y los socios generales, que son las firmas que patrocinan y gestionan los fondos de mercados privados.
Las preguntas clave sobre los mercados privados incluyen si los inversores institucionales pueden proteger eficazmente sus intereses en las negociaciones con los gestores a pesar de las asimetrías de información o si, por el contrario, los gestores de fondos tienen un poder desproporcionado.
Un reciente informe denominado Mercados privados: las cuestiones de gobernanza toman relevancia se centró en analizar los fondos privados ilíquidos, incluidos fondos de capital privado, crédito, capital de riesgo, bienes raíces e infraestructura, y profundizó en cuestiones críticas dentro de los mercados privados que incluían entre otras las siguientes: conflictos de interés multilaterales, opacidad, valoración, tarifas y gastos, y enfoque regulatorio. El objetivo del informe no era ni respaldar ni censurar los mercados privados, sino ofrecer una comprensión neutral beneficiosa para los profesionales de la inversión, los reguladores y otras partes interesadas en los mercados financieros. En general, los profesionales demandan más divulgación, y están dispuestos a apoyar regulaciones que obliguen a esa divulgación. Pero no llegan al punto de decir que se debe prohibir una práctica específica.
La mayoría de los encuestados para el estudio expresó un punto de vista moderado al evaluar los problemas de los mercados privados y la necesidad de una mayor regulación. Una pequeña mayoría (51%) afirmó que las prácticas del mercado privado pueden mejorarse, pero los problemas no son significativos. Una mayoría similar (52%) apoyó nuevas regulaciones, pero solo con medidas limitadas. En general se favorecía la divulgación requerida (o divulgación y consentimiento) en lugar de prohibiciones directas. En cuanto a regulaciones específicas, la gran mayoría apoyaba los requisitos para que los gestores proporcionen auditorías anuales (79%), estados trimestrales (70%) y una opinión de equidad o valoración de cualquier transacción secundaria dirigida por un asesor (61%).
Basados en los principales hallazgos del estudio y la actual situación de los mercados privados, las siguientes recomendaciones para inversores y reguladores podrían implementarse razonablemente.
Para inversores: como con cualquier inversión, realice la diligencia debida y no permita que el miedo a perderse impulse su decisión. Coordine entre los equipos de inversión y legales de su institución y dé a estos últimos el tiempo adecuado para realizar una revisión legal significativa antes de comprometerse con un fondo. Obtenga información adecuada y no acepte asimetrías de información excesivas. Esté dispuesto a retirarse de un acuerdo si los términos son demasiado problemáticos. Mantenga la vigilancia después de firmar con el fondo: una actitud de acordar y olvidar invita a una tipología de normas que no protegen los intereses de los inversores. Aborde cualquier posible conflicto interno dentro de su institución.
Para los reguladores: reconozca que la regulación tiene un papel legítimo que desempeñar en los mercados privados al establecer barreras básicas, incluso permitiendo a los actores privados negociar términos óptimos. Enfóquese en la transparencia, los conflictos de interés, las tarifas y los gastos, y las valoraciones. Preserve la integridad del mercado público; no debilite las protecciones de los inversores en los mercados públicos en un esfuerzo equivocado por atraer a más empresas públicas. Y finalmente, sea cauteloso con el acceso minorista. Si lo permite, considere requerir que las inversiones minoristas se realicen a través de intermediarios profesionales que tengan el tamaño y la experiencia para superar las asimetrías de información y los riesgos de selección adversa en los mercados privados.
Stephen Deane es director de Capital Markets Policies en CFA Institute y José Luis de Mora es presidente de CFA Society Spain.
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