¿Cuánto gastaremos en el Black Friday?

El último viernes de noviembre marca el inicio de la temporada navideña y de más consumo, pero ¿qué haremos con lo que ahorremos?

VioletaStoimenova (Getty Images)

El 76% de los encuestados por la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) se muestran atraídos por los descuentos y promociones de esta época del año, un 8% menos que el año pasado. De la encuesta realizada a consumidores de entre 18 y 74 años se prevé que el gasto medio sea de 201 euros, 36 euros menos que en 2023.

Aun así, muchas veces compramos más de lo que pensábamos. El 39% muestra un comportamiento compulsivo: adquieren cosas que no necesitan o gastan más de lo planeado. Un 16% reconoce que el año pasado gastó más de lo que tenía presupuestado, un 22% adquirió productos que no tenía pensado comprar y un 15% cosas que no necesitaba.

Pero ¿por qué ha habido una caída en la intencionalidad de compra? El menor gasto previsto para el Black Friday puede estar relacionado con una mayor preocupación por las finanzas personales. Si nos fijamos en el ahorro de los hogares españoles, en el segundo trimestre del año, el porcentaje de ahorro de las familias sobre la renta disponible bruta era del 21,2%, frente al 19,6% del año pasado. Estamos en una de las mayores tasas desde el año 2013, según los datos del Instituto Nacional de Estadística.

En este sentido, los motivos que impulsan a los españoles a ahorrar son: la cultura del ahorro (22%), los imprevistos (20%), los viajes y vacaciones (14%), según indica un estudio del Observatorio de Caser. Otros motivos son las emergencias (10%) y por último comprar una vivienda (10%). Aquí entra en juego la edad, comprar una vivienda es el motivo principal para los jóvenes entre 18 y 29 años (19%), mientras que para el resto de las edades destacan los imprevistos.

Respecto al gasto, el INE señala que, en el segundo trimestre del año, los hogares gastaron menos de lo que ingresaron, aumentando su renta disponible un 8,7% interanual, hasta los 278.195 millones de euros. En este sentido, los hogares ahorraron 59.031 millones de euros, un 17,6% más que el año pasado en el mismo periodo.

¿Qué hacemos con nuestro ahorro?

El ahorrador español es, tradicionalmente, conservador, tiene miedo a arriesgarse demasiado, a no recuperar lo invertido. En el contexto actual, marcado por bajadas de tipos de interés, cambios geopolíticos, guerras y, en definitiva, incertidumbre, muchas personas pueden haber tenido la tentación de salirse del mercado o de apostar por productos muy conservadores como, por ejemplo, los depósitos.

Se trata de un producto con riesgo reducido que en el pasado ofrecía retornos atractivos, pero que, en la actualidad, con los tipos a la baja, cada vez dan menos rentabilidad. Muchas veces esta preferencia responde al desconocimiento sobre las implicaciones que tiene esta elección y sobre las alternativas de inversión como, por ejemplo, los fondos de inversión.

En este sentido, es importante que los ahorradores tengan siempre en cuenta el efecto de la inflación sobre el dinero cuando analizan sus opciones de inversión antes de tomar ninguna decisión. Tener 10.000 euros hoy sin invertir, a diez años vista y con una inflación del 2% (objetivo anual del Banco Central Europeo) supone perder 1.797 euros (actuales) de poder adquisitivo. A veinte años vista la pérdida de poder de compra sería de 3.270 euros.

Cuando se trata de dinero y de seleccionar dónde lo invertimos, en ocasiones, nos dejamos llevar por el corto plazo, por nuestros sesgos cognitivos y por el miedo, olvidándonos de lo fundamental: nuestro objetivo de inversión, nuestro horizonte temporal y una correcta evaluación de nuestro perfil de riesgo.

Por eso, para evitar tomar decisiones que nos puedan perjudicar en el largo plazo, es bueno tomar perspectiva y establecer un objetivo claro. De esta manera, podremos trazar nuestro plan de inversión, el más adecuado y eficiente teniendo en cuenta todas nuestras circunstancias.

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