El Ibex toma aire: los récords de 2007 se le resisten
La recogida de beneficios en Wall Street aceleran la consolidación de las Bolsas europeas
Las Bolsas comienzan a dar señales de cansancio. Tras semanas de ascenso imparable impulsado por la inteligencia artificial, el mercado empieza a sentir el peso de las tensiones políticas en Francia y Estados Unidos, que algunos inversores aprovechan para recoger beneficios. El Ibex 35, que hasta ahora había derribado barreras con facilidad, encuentra ahora más difícil mantener el ritmo.
En una jornada en la que los bancos e Inditex se tiñeron de rojo, el Ibex 35 corrigió un 0,6% y volvió a perder la barrera de los 15.600 puntos. Los inversores mantienen la esperanza de que la Bolsa española pueda volver a los récords registrados hace 18 años, pero para ello será necesario que las ganancias se amplíen. “Necesitará la ayuda de alguno de los grandes pesos pesados, que sin duda se han quedado rezagados este año y que pueden dar aliento a un pelotón de cabeza (sector bancario) que llega justo de fuerzas a este final de etapa”, apuntan los analistas de Activotrade.
Aunque los bancos e Inditex (-1,3%) han restado más puntos al selectivo, los mayores recortes los han protagonizado Puig (-6,7%), ArcelorMittal (-2,75%) y Repsol (-2,1%). La firma de cosmética recibe un nuevo revés por parte de las casas de análisis: JP Morgan recortó drásticamente su valoración, hasta 12,5 euros desde los 25 anteriores.
En el lado positivo han destacado las energéticas y las aerolíneas: Solaria subió un 4%; Acciona Energía, un 1,22% e IAG, un 2,99%.
El comportamiento del Ibex ha seguido la tendencia de los índices europeos. El alivio que experimentaron los activos franceses fue temporal: la decisión de Emmanuel Macron de no convocar elecciones y nombrar un nuevo primer ministro no bastó para reanimar la Bolsa. El Cac francés retrocede un 0,23%. “El problema principal de Francia, su fragmentado panorama político, sigue sin resolverse. Sin una mayoría parlamentaria estable, es probable que las reformas estructurales y la consolidación fiscal queden fuera de alcance, manteniendo a los inversores cautelosos”, afirma Mathieu Racheter, director de investigación de renta variable de Julius Baer. Junto al Cac y al Ibex, el FTSE británico cedió un 0,41% y el Euro Stoxx 50, un 0,23%, mientras que el Dax alemán avanzó un 0,22%.
Al cierre de Europa, Wall Street se desinfla ligeramente y corrige un 0,3%. Tras el cierre de gobierno, la economía estadounidense navega sin brújula, pero eso parece importar poco a unos mercados hipnotizados por el fulgor de la inteligencia artificial. Ni la inflación ni el empleo —los viejos fantasmas de la Reserva Federal— logran captar la atención de los inversores, más atentos a los titulares tecnológicos que al pulso real del país. Sin embargo, todo tiene un límite y en las últimas semanas han vuelto a resonar los tambores de burbuja. Los analistas de Morgan Stanley llaman a la calma, recordando que, a diferencia de hace 25 años, las grandes compañías del sector tecnológico siguen mostrando capacidad creciente de generar beneficios. “Eso no significa que el mercado no vaya a sufrir correcciones”, apuntan.
Los precios del petróleo retroceden después de que se anunciara un acuerdo de alto el fuego entre Israel y Hamás en Gaza y un segundo aumento semanal consecutivo en las reservas estadounidenses añadiera presión sobre los precios. El Brent bajó un 1%, hasta 65,5 euros.
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