Los mercados centran la atención en los resultados y el Ibex conquista los 12.500 puntos
El selectivo español prolonga el rally y sube un 1,3% de la mano de Santander
Los inversores consiguen abstraerse del ruido y dirigen la atención hacia los fundamentales. Después de un inicio de semana en el que las amenazas arancelarias volvieron a poner a prueba los nervios de los inversores, los sólidos beneficios de la campaña de resultados ofrecen cierto consuelo. Con el impulso de Banco Santander, el Ibex 35 logra distanciarse de la apatía que reina en Europa y se anota un 1,32%. El selectivo español, que ha permanecido al margen de las tendencias de inversión dominadas por la inteligencia artificial, pisa el acelerador y se alza en los 12.500 puntos, máximos de 2008. La Bolsa española amplía las ganancias en 2025 al 8,12%, solo superada por el Dax alemán, índice que no descuenta los dividendos.
Apenas dos semanas después de la llegada de Donald Trump a la Casa Blanca, los analistas consideran que los constantes sobresaltos y cambios de política que se han producido en este periodo de tiempo no son sino un aviso de qué cabe esperar durante los próximos cuatro años. Los inversores deberán acostumbrarse a episodios de volatilidad y como señalan desde Berenberg, “se acabaron las ganancias fáciles”.
El panorama se antoja complicado, pero no todo está perdido. La banca continúa sacando el máximo partido al entorno de tipos. Aunque han bajado en los últimos seis meses, las tasas están lejos de los mínimos históricos registrados años atrás. Siguiendo la estela de Bankinter, BBVA y CaixaBank, Santander cerró 2024 con un beneficio récord de 12.574 millones. La entidad ha pasado con nota el examen y los inversores así se lo han reconocido. Además de anotarse un 8,29% en Bolsa, la mayor subida desde 2020, las acciones superan los 5 euros, máximos de 2018.
Los ascensos de la entidad se extendieron al resto de bancos del selectivo con la excepción de Bankinter (-0,29%) y CaixaBank (-0,71%). Junto a las ganancias del sector financiero sobresalen los ascensos de firmas beneficiadas por las expectativas de tipos más bajos. Merlin repuntó un 1,83%; Cellnex, un 1,66%; Acciona Energía, un 2,07% y Grifols, un 1,95%. Los mayores recortes corrieron a cargo de Indra (-1,48%), que trata de digerir los cambios en la cúpula directiva y la compra de Hispasat, y Fluidra (-1,52%). El fabricante de piscinas es una de las cotizadas más perjudicadas en caso de que Trump extienda los aranceles a la Unión Europea.
En el arranque de 2025 el mercado está asistiendo a un cambio de tendencia. Después de años de dominio de la Bolsa estadounidense ahora es la renta variable europea la que toma la delantera. En lo que va de ejercicio el Dax alemán sube un 8,42%; el Cac francés, un 6,92%; el Mib italiano, un 7%; el Euro Stoxx, un 7,66%; el FTSE británico, un 5,51% y el Stoxx 600, un 6,1%. Por debajo de estas ganancias se sitúan los ascensos del 2,7% que registra el S&P 500. “Los inversores han comenzado a ver oportunidades en la renta variable europea, especialmente considerando la divergencia de política monetaria. Las bajas valoraciones, combinadas con un debilitamiento del euro han favorecido las estimaciones de beneficios y han comenzado a atraer flujo de capital hacia la región”, señala Antonio Castelo, analista de iBroker.
Por su parte, Ignacio Cantos, director de inversiones de Atl Capital, afirma que las acciones europeas se están viendo apoyadas por una subida más amplia de cotizadas. Es decir, los ascensos no se limitan a un puñado de nombres. La irrupción de DeepSeek y su modelo de inteligencia artificial más eficiente y económico ha acelerado la corrección de los siete magníficos, los responsables de la mitad de la ganancias de la Bolsa estadounidense en 2024. Los recortes de las últimas semanas han ayudado a reorganizar las carteras y se han visto amplificados por los elevados niveles de sobrecompra que venían registrando las grandes tecnológicas.
El aumento de la competencia en el negocio de la IA se ha visto acompañado por los menores ingresos del negocio en la nube de Microsoft y Alphabet y las dudas sobre el mercado chino ahora que se ha reeditado la guerra comercial. Mientras Trump ha aplazado un mes la aplicación de los aranceles a México y Canadá ahora pone la atención en China. Pekín no se ha quedado de brazos cruzados y además de gravámenes de entre el 10% y el 15% a la importación de algunos productos estadounidenses ha iniciado una investigación a Google. Los inversores contienen la respiración ante el temor de una escalada de las tensiones. Día a día son más las voces que apuntan a que el riesgo de una guerra comercial continúa infraponderado en el mercado.
Los analistas de UBS reconocen que la incertidumbre sigue siendo elevada y es probable que persista la volatilidad, dada la inclinación de Trump a utilizar los aranceles como arma negociadora para lograr sus propósitos. En este contexto los expertos aconsejan dejar a un lado los titulares y centrarse en los resultados. “El crecimiento de los beneficios sigue siendo saludable”, apuntan. Más del 60% de las cotizadas del S&P 500 que han hecho pública sus cuentas han superado las estimaciones de ventas y el 75% las de beneficios.
Los analistas recomiendan cautela y piden no dejarse llevar por los nervios. Aunque Europa parece más atractiva, los riesgos global y las incertidumbres siguen siendo elevadas. De momento Trump ha optado por dejar a un lado las amenazas al Viejo Continente, pero la situación puede cambiar en cualquier momento. La aplicación de aranceles podría lastras a una economía que ya viene mostrando signos de debilidad. A ello se suman los problemas domésticos de cada economía con la alemana el punto de mira. Hasta la fecha el mercado viene confiando en que el ejecutivo resultante de las elecciones del próximo 23 de febrero decida levantar las restricciones al límite de deuda para impulsar la economía, una idea que sigue generando desconfianza en vista de ortodoxia fiscal que durante años han venido defendiendo la locomotora de Europa.
Más estabilidad que la renta variable la muestra el mercado de deuda. Las expectativas de mayores rebajas de tipos en la zona euro han acelerado la rebaja de las rentabilidades de los bonos. La referencia española con vencimiento en 2035 cae por debajo del 3% con la alemana al mismo plazo en el 2,36%. A medida que la Bolsa estadounidense ha corregido, los inversores han acelerado el trasvase de flujos de las acciones a los bonos. Esto ha servido de contrapunto a las expectativas de tipos más altos. El bono estadounidense a 10 años que en enero apuntaba al 5% se ha ido alejando de esta barrera y se sitúa en el 4,4% con la deuda a dos años en el 4,17%.
En el mercado de divisas el retraso de los aranceles a México y Canadá ha puesto a prueba el rally del dólar. Después de que a comienzos de semana la paridad euro-dólar estuviera a punto de convertirse en una realidad, la divisa europea recupera el pulso y se alza hasta los 1,042 billetes verdes.
Bolsas - Divisas - Deuda - Tipos de interés - Materias primas