Las Bolsas europeas pinchan y buscan alicientes para prolongar el buen tono
El Ibex se deja un 0,38% y pierde los 11.800 puntos lastrado por los valores cíclicos
El optimismo de los inversores con los estímulos anunciados por China se ha desvanecido y con ello las alzas de las Bolsas europeas en una jornada de consolidación en la que el petróleo Brent ha virado a la baja ante las dudas de si estas medidas se traducirán en una mayor demanda y en la que el tono de la economía europea empieza a ponerse en cuestión. En cambio, el oro ha vuelto a revalidar sus máximos ante las dudas suscitadas por el empeoramiento de la confianza de los consumidores en EE UU.
El Ibex se ha dejado un 0,38% y ha perdido la cota de los 11.800 puntos en una sesión en la que han corregido los valores más beneficiados en la jornada previa. Acerinox se ha dejado un 1,8%, mientras que Puig ha restado un 1,68% y Arcelor Mittal ha perdido un 1,02%. Tampoco se ha librado de las caídas Inditex, que ha caído un 1,65% en una sesión en la que han imperado los recortes. Fluidra ha liderado por contra las alzas, con un 2,37%, seguida por Solaria (2,34%) y Redeia (1,16%).
Los números rojos han sido una constante en la renta variable europea, con el Cac francés dejándose un 0,54 y el Dax alemán restando un 0,39% tras tocar máximos históricos en la jornada previa. Tampoco se ha librado el Euro Stoxx 50, con una caída del 0,47% en una sesión de ganancias entre las aerolíneas tras una mejora a Air France-KLM por parte de JP Morgan. El holding de aerolíneas francés se ha disparado un 6%, mientras que IAG ha avanzado un 0,25%.
Entre las caídas más relevantes vistas en la Bolsa europea, los títulos de SAP se han dejado un 2,4% tras conocerse una investigación a la empresa por parte de las autoridades estadounidenses por fijación de precios.
En el mercado de deuda, la rentabilidad del bono español a diez años ha vuelto a distanciarse del rendimiento del español al mismo plazo un día después de que la prima de riesgo gala alcanzara cotas no vistas desde de 2008. Así, el rendimiento del bono español a una década se sitúa en el 2,98%, mientras que el francés al mismo plazo baja al 2,967%. Chris Iggo, de la gestora de fondos AXA Investment Managers, apunta que “la rentabilidad de la renta fija sigue siendo bastante atractiva y debería serlo aún más en comparación con el efectivo en los próximos meses. La mayoría de los inversores deberían estar más satisfechos con la renta variable de crecimiento. No deberíamos descartar sorpresas al alza en los beneficios de las tecnológicas en el tercer trimestre y en 2025. El mercado alcista podría prolongarse hasta bien entrado el próximo año”.
En el plano macroeconómico, a falta de datos más relevantes, los inversores se mantienen atentos a la publicación del PCE en EE UU del viernes, la medida favorita de la Fed para calibrar los precios. El mercado espera que el dato muestra un enfriamiento de la inflación y de alas a un nuevo recorte de las tasas en su próxima cita de noviembre.
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