Claves sobre el LK-99: ¿por qué está todo el mundo obsesionado con los superconductores a temperatura ambiente?
Este tipo de material es una suerte de piedra filosofal para los científicos, ahora, aseguran haberlo encontrado, pero hay muchas dudas entre los expertos
Tiembla Chat-GPT, porque ahora, la superconductividad está de moda. El concepto de desarrollar técnicas que permitan el transporte de electricidad sin resistencia es absolutamente tentador, porque tiene el potencial de revolucionar la industria eléctrica, reducir la pérdida de energía ayudando al planeta y además, contribuir a bajar las facturas de los consumidores. Todo en uno. Pero aunque la superconductividad como tal ya se ha logrado, hasta ahora solo ha sido posible a temperaturas extremas como 269 grados bajo cero, o en presiones muy elevadas, lo que ha limitado su uso a una serie de útiles y caras aplicaciones como en los escáneres de resonancia magnética hospitalarios.
Por esto mismo, las afirmaciones sobre el descubrimiento del primer superconductor a temperatura ambiente ha atraído la atención de todo el planeta y ha provocado fuertes alzas en algunas cotizadas coreanas y chinas. Ello a pesar de las dudas que han expresado desde parte de la comunidad científica sobre el LK-99, el nombre por el que se ha denominado a este superconductor. Pero debido al potencial de cambiar la vida de muchas personas, el superconductor ha encontrado un altavoz perfecto en diferentes streamers y youtubers y, además de en papers coreanos, está en boca de todos. A continuación, las claves de la última obsesión del mercado.
¿Qué es un superconductor?
En circunstancias normales, es decir, sin superconductores de por medio, la electricidad es difícil de enviar de un lugar a otro porque los electrones chocan entre sí, creando calor y perdiendo con ello energía. A mayor resistencia del material, más pérdida energética. Los superconductores son materiales que conducen la electricidad con una resistencia casi nula. Actualmente, se sabe que presentan tales propiedades solo en condiciones extremas de enfriamiento o presión. En 1911, el mercurio fue el primer material al que se le descubrió esta propiedad. Desde entonces, se ha descubierto esta misma propiedad en diferentes aleaciones metálicas, cerámicas y otros materiales que conducen la electricidad con una resistencia casi nula, pero solo lo hacen cuando están a muchos grados bajo cero o sometidos a altísimas presiones.
¿Qué es un superconductor a temperatura ambiente y por qué es importante?
Un superconductor a temperatura ambiente sería aquel capaz de conducir electricidad sin resistencias y sin tener que estar sometido a condiciones especiales de temperatura o presión. Crear y producir en masa este material revolucionaría por completo el transporte de electricidad y reduciría significativamente las emisiones de gases de efecto invernadero. Además, ampliaría las posibilidades energéticas a cotas ahora inimaginables. Por ejemplo. La energía solar o eólica podría ser transportada a enormes distancias desde su lugar de producción al de consumo sin pérdidas en el camino. Pero más allá de la electricidad como tal, estos superconductores significarían un impulso dramático a toda tecnología basada en electromagnetismo. Desde trenes de levitación a energía de fusión nuclear comercialmente viable. La publicación especializada Science describe a los superconductores como “uno de los objetivos más buscados en toda la ciencia de los materiales y en la física”.
¿Qué es lo que dicen haber logrado los científicos?
Dos papers científicos elaborados por expertos en materiales del Centro de Investigación de Energía Cuántica y del Instituto Coreano de Ciencia y Tecnología, ambos con base en Seúl, han asegurado que han sido capaces de sintetizar un superconductor a temperatura ambiente “por primera vez en la historia”. El compuesto, que han denominado LK-99, está formado por plomo, fósforo y oxígeno. Los investigadores sostienen que han probado la superconductividad de LK-99 demostrando cómo el material responde al paso de la electricidad a través de él o cómo reacciona ante la exposición a campos magnéticos. Todo sin condiciones extremas de temperatura o presión. Los papers se compartieron en estado de prepublicación, lo que significa que el trabajo no había sido revisado por los pares de estos científicos. Con todo, los documentos espolearon una carrera de investigadores y laboratorios a nivel mundial tratando de replicar los resultados. Al menos una persona transmitió en Twitch sus esfuerzos por lograrlo en directo.
¿Qué dicen otros científicos?
Las noticias de la investigación han sido acogidas con una mezcla de entusiasmo y escepticismo. Dos equipos de investigadores independientes, uno en India y otro en China, aseguran haber recreado el LK-99, logrando crear un compuesto con exactamente la misma estructura del paper original, pero ninguno de los dos encontró evidencias de superconductividad. La investigación de las propiedades de LK-99 encabezada por Sinead Griffin, experto del Lawrence Berkeley National Laboratory, dictaminó que, efectivamente, la superconductividad era una de las explicaciones de los resultados, pero advirtió que también podrían deberse a una rica variedad de otros fenómenos. La buena noticia es que, como mínimo, el material se podría catalogar de “inusual” y los científicos continúan profundizando en sus propiedades. La mala, es que, por el momento, no ha habido evidencias concluyentes en otros laboratorios sobre la superconductividad a temperatura ambiente y que muchos otros intentos en el pasado se estrellaron finalmente.
¿Es la primera vez que alguien asegura haberlo conseguido?
No. En marzo de este año, un artículo en Nature defendía que se había descubierto un superconductor de estas características. El paper fue acogido con escepticismo porque el autor publicó un artículo también en Nature en 2020 proclamando el mismo descubrimiento. Nature se retractó en 2022 de ese anterior artículo. Se ha proclamado la superconductividad a temperatura ambiente en otros materiales, pero o bien requerían enormes cantidades de presión, o no fueron corroborados por otros científicos al margen de los autores.
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