El Gobierno retira el empaquetado genérico de la nueva Ley Antitabaco
La Asociación para la Defensa de la Marca (Andema) se muestra satisfecha de la rectificación del texto, que tendrá que debatirse en el Congreso
El Gobierno ha retirado la regulación del empaquetado genérico de las cajetillas de cigarrillos del anteproyecto de la futura Ley Antitabaco aprobado este martes. Esta fue una de las iniciativas del Ministerio de Sanidad para reducir el consumo de tabaco que más polémica había causado. La idea es eliminar los logos y colores de las cajas para que el supuesto glamur de fumar se desvanezca. Las marcas se opusieron desde el principo por la ineficacia demostrada por la medada en otros países —como Francia o Reino Unido— y por atentar contra sus derechos de propiedad industrial e intelectual.
A pesar de que el texto definitivo aún debe pasar por el Congreso y de que es posible que el ministerio intente entonces introducir esta medida, ya hay voces que celebran que el Gobierno la haya aparcado. Entre ellas, la Asociación para la Defensa de la Marca (Andema) que ha manifestado su satisfacción en un comunicado. La asociación representa a unas cien empresas de diferentes sectores económicos.
Para Andema, el empaquetado genérico es “una medida que implica la eliminación de facto de la marca y que vulnera los derechos de propiedad industrial y la libre competencia y libertad de empresa protegidos por la legislación española". La medida, afirman desde la asociación, provocaría inseguridad jurídica y supondría un " peligroso antecedente para otros sectores económicos que podrían verse afectados".
Estudio
En 2024, el Centro de Estudios Andema presentó el Estudio sobre Empaquetado Genérico, en el que se señalaba que esta medida vulneraba los derechos relacionados con la propiedad industrial reconocidos por la legislación española en la Ley 7/2001 de Marcas. Si se retiran los logos de las cajetillas, las marcas de estos productos pueden caer en desuso y, por tanto, ser anuladas por caducas. Además, también el informe también subraya que la medida puede provocar confusión entre empresas competidoras, una situación prohibida por la Ley 3/1991 de Competencia Desleal.
El informe constata asimismo que la restricción de la marca penaliza el esfuerzo realizado por las empresas en su construcción y en los valores empresariales que están detrás de la misma. Paradójicamente, apunta, “se provoca un efecto contrario al perseguido pues al difuminarse en la mente del consumidor la información y reputación asociada con la enseña, el producto se convierte en un básico". Se produce así un empobrecimiento a lo largo de la cadena de valor que perjudica a todos sus eslabones, así como a otros sectores relacionados, concluye.
Además, “la homogenización de las marcas facilita la falsificación: los productos resultan más fáciles y baratos de copiar. La experiencia en los tres países pioneros en aplicar el empaquetado genérico en el sector del tabaco confirma un incremento del comercio ilegal —Australia, Francia y Reino Unido tienen tasas de consumo ilícito de entre el 20% y el 30%—, sin que haya podido demostrarse su eficacia en su objetivo de reducción de la prevalencia”, señala Gerard Guiu, director general de Andema.