El IVA energético recauda 2.500 millones de euros más en 2022 pese a la rebaja fiscal

La industria energética aporta 8.500 millones al impuesto frente a los 5.900 millones de 2021

Belén Trincado Aznar

El impuesto sobre el valor añadido (IVA) recaudó en España durante el año 2022 algo más de 85.380 millones de euros, un aumento del 13% respecto a los 75.300 millones embolsados un ejercicio antes. De esta cantidad, que ...

Regístrate gratis para seguir leyendo en Cinco Días

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte


El impuesto sobre el valor añadido (IVA) recaudó en España durante el año 2022 algo más de 85.380 millones de euros, un aumento del 13% respecto a los 75.300 millones embolsados un ejercicio antes. De esta cantidad, que supone un récord en la serie que actualiza anualmente la Agencia Tributaria, cerca del 10% viene exclusivamente de la industria energética, extractiva y del agua, uno de los sectores que más ha notado la subida de los precios registrada en los últimos años. En concreto, la recaudación del IVA vinculada a esta actividad rozó el máximo histórico de 8.500 millones de euros, casi 2.500 millones más (un 43%) que los 5.900 millones de euros que se ingresaron un año antes.

El desglose del peso de todas estas actividades fue publicado ayer por la Agencia Tributaria y permite poner de relieve las consecuencias de la crisis inflacionista en los ingresos públicos. Pero también sirve para poner en contexto cuáles han sido las consecuencias de las medidas de alivio impulsadas por el Gobierno.

En concreto, el máximo energético de 8.500 millones podría haber sido mucho más elevado si el Ministerio de Hacienda no hubiese puesto en marcha en los últimos meses y años las diferentes rebajas fiscales diseñadas para aliviar a empresas y hogares ante los elevados precios del gas o la electricidad.

En concreto, únicamente en lo que se ciñe al IVA, los ingresos vinculados al sector energético podrían haber ascendido en el ejercicio pasado a los 10.000 millones de euros si el Gobierno no hubiese puesto en marcha las rebajas de los respectivos tipos impositivos.

En verano de 2021, cuando los precios de la electricidad comenzaban a escalar, Hacienda puso en marcha una rebaja del IVA eléctrico –primero al 10% y después al 5%– que en 2022 tuvo un impacto recaudatorio negativo de 1.313 millones de euros, según revela el Plan Presupuestario de 2024 que el Gobierno remitió esta semana a la Comisión Europea. En octubre de 2022, ya con la guerra en Ucrania en marcha, el Ejecutivo impulsó una nueva rebaja, reduciendo en esta ocasión el IVA del gas, la madera y los pellets al 5%. Esta medida tuvo un impacto el pasado ejercicio de 219 millones. Por eso, si estas dos cantidades se sumasen a la recaudación efectiva del IVA energético, los ingresos por esta partida habrían crecido casi un 75% en un año.

La energía supone un pellizco importante en los ingresos por IVA. Sin embargo, según reflejan los datos de la Agencia Tributaria, el sector que más aportó fue el del comercio, reparaciones y transporte, una amalgama que reúne actividades dispares como la distribución y comercio de alimentos y por el que Hacienda se embolsó 34.000 millones de euros, un 13% más que en 2021. A continuación estarían los servicios a empresas, que ingresaron 15.000 millones; la construcción y las actividades inmobiliarias, con 9.800 millones; y la industria, con 8.900 millones. Pese al aumento de los precios, estas actividades han crecido entre el 4% y el 14% de un año a otro, lejos del 43% anotado por el sector energético.

Grandes empresas

Los datos actualizados por la Agencia Tributaria también permiten ver el comportamiento de los diferentes agentes económicos en el impuesto. Así, de los 85.380 millones recaudados a través del IVA, el 65%, es decir, 55.723 millones, vino directamente de un grupo conformado por 39.000 grandes empresas. A continuación se situaron las pymes, con una recaudación de 20.900 millones de euros (el 24%), y las personas físicas que repercutieron el impuesto, con 7.500 millones (el 8,8%). El resto, una cifra simbólica de apenas 1.200 millones, proviene de entidades como las comunidades de propietarios o las organizaciones religiosas.

Aunque todos estos grupos han ido aumentando año a año el volumen de aportaciones al impuesto –en línea con el paulatino crecimiento de la recaudación total–, el protagonismo de las grandes compañías es indudable. De hecho, para hacerse una idea de estas magnitudes, los 55.700 millones vinculados a los grandes grupos en 2022 equivalen al total del IVA que se recaudaba apenas hace 10 años.

La estadística también muestra otra serie de variables como el papel que tiene cada autonomía en el total de la recaudación. Madrid, por ejemplo, ingresó más de 45.800 millones del total, muy por encima de Cataluña, con 16.600 millones que la sitúan en segunda posición.

Estas fuertes diferencias se deben al funcionamiento del impuesto, ya que el elemento diferenciador no es el consumo, sino el lugar en el que se encuentra la empresa u organismo que crea el valor añadido sujeto al gravamen. Madrid, gracias a su capitalidad, es sede de las principales empresas que hay en España, por lo que concentra la mayor parte de los bienes y servicios que después deben tributar.

Sigue toda la información de Cinco Días en Facebook, X y Linkedin, o en nuestra newsletter Agenda de Cinco Días

Sobre la firma

Más información

Archivado En